El descaro del régimen cubano no cesa. Ante la escasez de alimentos que recrudece cada día en la Isla, el castrismo sigue mostrando su desinterés en solucionar los problemas de los cubanos.
En esta ocasión, ciudadanos denunciaron que el régimen repartió arroz con gusanos en Santa Clara.
A Migdalia Rodríguez le sorprendió un leve cosquilleo en las yemas de los dedos mientras escogía el arroz que repartieron en su bodega a principios de febrero, según reseña Cubanet .
En principio a la mujer pensó que se trataba de algún gorgojo y le pareció normal encontrar eso en este cereal normado por la libreta de abastecimiento cubana.
Mientras separaba los granos en busca de piedras y pajas pudo palpar un hilo blanquecino, parecido a la telaraña, de donde emergieron tres o cuatro lombricillas que se arrastraron por todo el paño dispuesto sobre la mesa.
Posteriormente ante las dificultades de ella para ver de cerca, llamó a su hija y a su vecina para que corroboraran lo que había en el arroz y determinaron que se trataban de gusanos.
Larvas que se alimentan de los granos
De acuerdo con la teoría científica, esta especie de insectos herbívoros se nombra Sitophilus Oryzae y resulta comúnmente conocida como gorgojo.
La larva, que se alimenta del grano, aparece en su fase primaria en forma de pequeño gusano blanco y ovalado hasta que sufre una metamorfosis para convertirse en una verdadera plaga.
Los vecinos afectados se quejaron en la tienda correspondiente pero allí no les cambiaron el producto. Los vendedores alegaron que el arroz “vino así y así tenían que venderlo”.
“Lo peor es que el arroz se compra a principios de mes y ese gusano, por más que lo trates de sacar, se va reproduciendo. Ahora mismo, está lleno de huevos blancos, está todo contaminado, así no hay quien se lo coma. Además, tiene muchos granos amarillos y punticos negros. La solución es comprar por la calle”, explicó la afectada.
Es importante mencionar que con la libreta de abastecimiento castrista se le vende a la población cinco libras de arroz y dos más adicionales por persona al precio total de 2.25 pesos.
Mientras, en las calles, los particulares expenden el cereal a cinco pesos y el estado los distribuye de forma liberada en los llamados “marcados comerciales” con mejor calidad, pero más caro que el normado por las bodegas.
Por lo que ha muchos cubanos se les hace imposible acceder a este cereal con mejor calidad y deben soportar las migajas que les lanza el régimen cubano.
Redacción Cubanos por el Mundo