La falta de carros fúnebres en La Habana es una realidad que cada día se agudiza más. Jorge Luis González Haidar, director provincial de la estatal Unidad Presupuestada de Servicios Necrológicos de La Habana, dijo al periódico Tribuna de La Habana, que actualmente se necesitan en la capital 80 vehículos y la base de transporte de la entidad cuenta solo con 53, que además se encuentran “altamente sobrexplotados”.
Según el funcionario, a diario trabajan 45 de estos vehículos para diferentes servicios. Fúnebre, ambulancia, viaje por carretera y recogida de vísceras, amputaciones y fetos; y ninguno puede asumir la función de otro.
Deterioro en los servicios
Las estructuras necrológicas en La Habana siguen padeciendo la falta de carros fúnebres, denuncias de pérdida de restos, jardineras y lápidas e incluso la profanación de tumbas, así como constantes quejas por los deficientes servicios de cremación en medio del aumento de las defunciones en la capital.
No obstante, la situación es menos compleja que hace dos años, cuando entre 22 y 25 carros fúnebres debían atender toda la provincia.
Actualmente, según estadísticas manejadas por González Haidar, un promedio de 85-90 personas mueren diariamente en La Habana. Incluso la cifra de fallecidos puede superar el centenar, “contra una media de 65 defunciones años atrás en igual periodo”.
El semanario oficial de la capital cubana señaló que la cremación constituye una alternativa altamente demandada, pero en La Habana solo existen dos inmuebles con cuatro incineradores que no pueden asumir más de 32 cremaciones por día, contra 40-45 solicitudes en ese tiempo.
En Cuba el deficiente servicio funerario, exclusivamente estatal, se paga caro aún con precios asequibles. Es una práctica habitual recompensar con dinero a los funcionarios para agilizar los trámites.
Redacción Cubanos por el Mundo