Funcionarios del represor Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), presuntamente intimidaron y relevaron de su cargo al capitán del tanquero “Manuela Sáenz”, luego de negarse a zapar a Cuba para llevar un cargamento de gasolina y diésel, detalla la web Infobae.
El capitán, así como su tripulación, se negaron a navegar a la Isla, tras las sanciones impuestas por Estados Unidos. Sin embargo, el chavismo colocó a otra persona y quitó el dispositivo GPS del barco para evitar ser rastreado.
Ahora el buque aparece atracado en Cuba, pero durante su trayecto el barco aparecía navegando entre Jamaica y Haití.
Sin embargo, a pesar de que el país petrolero sigue enviando sus recursos a la Isla, la situación de combustible en su territorio es crítica.
En los estados fronterizos las colas pueden durar días. Y los grupos irregulares que manejan la gran industria del combustible se han asesinado entre ellos.
Así mismo, el personal de Petróleos de Venezuela (PDVSA) elaboró un mapa sobre la situación de la reserva de gasolina en Venezuela, en el que se revela la grave crisis del combustible al interior del país.
Por otro lado, el régimen de Venezuela está a punto de perder el buque Río Arauca, que se encuentra en Lisboa y es uno de los barcos más modernos y con mayor capacidad de transporte de crudo, esto por no pagar menos de dos millones de dólares en deudas.
“Ese barco, en cada viaje, le generaría mucho más dinero que esa deuda”, reveló una fuente citada por Infobae.
A eso se suma que desde hace dos años hay otros dos buques de la flota de PDVSA en total abandono. Uno es el “Negra Matea”, y el otro es el “Parnaso”.
Redacción Cubanos por el Mundo