Un grupo de migrantes cubanos y venezolanos en Uruguay, fueron estafados por una mujer que les cobraba el arriendo de la pensión en la que se estaba quedando, pero esta no le pagaba al dueño del edificio, razón por la que las autoridades procedieron a desalojarlos, detallan medios locales.
De acuerdo con la información, la señora no pagaba al propietario del edificio desde el año 2016, razón por la que las 34 familias que allí vivían recibieron la orden de abandonar el inmueble.
Aunque los inmigrantes desconocían de la situación, debieron empacar sus pertenencias y abandonar el local.
“Tanta molestia, tantas mentiras, tanto engaños hasta que decidimos no seguirle pagando hasta que no normalizara la situación y registrara el espacio como pensión ante la intendencia”, dijo una de las migrantes.
De momento, los refugiados podrán permanecer 15 días en un albergue ofrecido por una ONG en el barrio capitalino de La Teja, a la espera de que se encuentre una solución definitiva a la situación.
Activistas uruguayos esperan que durante ese tiempo se pueda gestionar un lugar para los migrantes, o al menos las certificaciones para que estos puedan acceder a una vivienda.
“Nos ha consternado muchísimo esta situación. Realmente una violación flagrante de los derechos humanos y todo nuestro grupo se ha sensibilizado”, señaló un joven estudiante uruguayo que ofreció asistencia a los inmigrantes.
Durante los últimos años, Uruguay se ha convertido en uno de los principales destinos de los inmigrantes cubanos. Estimados oficiales reflejan que solo en 2018 ingresaron a ese país más de 8 mil ciudadanos de la isla caribeña, de los cuales unos 5 mil solicitaron refugio a las autoridades.
Redacción Cubanos por el Mundo