Para muchos, la captura de un tiburón ballena en una playa de Las Tunas fue un acto inhumano, sin embargo un pescador cubano involucrado en el hecho, afirmó que todo fue involuntario.
De acuerdo con un reporte del Sistema Informativo de la Televisión Cubana, Jorge Peneque, quien es el patrón del barco que localizó al enorme escualo, expresó que este murió enredado en las redes, y que su intención nunca fue capturarlo.
“Nosotros tenemos bien claro cuáles son las especies que podemos capturar. Nosotros sí sabemos que eso es totalmente prohibido”, añadió.
Expresó que el pasado 2 de agosto, como de costumbre, salieron temprano para verificar las redes y se percataron que estaban más hundida de lo normal.
Cuando los buzos entraron al agua, se sorprendieron al ver que un tiburón ballena había muerto enredado.
Peneque indica que los pescadores cubanos saben que hacer en caso de que el animal hubiese estado vivo.
“El deber de nosotros era soltarlo, pero desgraciadamente estaba muerto ya”.
Es por eso que lo sacaron del agua con ayuda de un tractor. Su cadáver causó gran impacto en redes sociales por el enorme tamaño del escualo.
El pescador se defendió además de las críticas hechas contra ellos, fue afirma que “es muy fácil criticar sin preguntar”.
Sacar al tiburón ballena
Para sacarlo, los pescadores tuvieron que atar al tiburón ballena a la embarcación y lo llevaron hasta la Playa La Herradura, donde luego fue sacado por el tractor antes mencionado.
El escualo midió siete metros de largo y pesó 2,7 toneladas.
A raíz de esto, el pescador expresó que se colocarán boyas visibles para evitar que otros peces como este queden atrapados en las redes.
Expertos del CITMA afirman que el tiburón ballena es una especia “muy rara”, y que puede llegar a alcanzar hasta los 12 metros de largo.
Su principal fuente de alimento es el plancton y algunos peces pequeños.
Se le puede encontrar en aguas cálidas y en primavera migra a la plataforma continental, muy cerca de la costa oeste de Australia.
Redacción Cubanos por el Mundo