Las condiciones higiénicas del Hospital Maternidad Obrera, de Marianao, La Habana, son alarmantes. Fotos publicadas en redes sociales demuestra el desentendimiento de las autoridades cubanas por preservar un espacio adecuado para los cubanos que asisten al centro hospitalario.
Botes de basura desbordados de desechos, baños sucios, pisos mugres y paredes a punto de colapsar, eso es lo que denunció con fotos el cubano Antonio Rossi.
Rossi, quien reside en Holanda, afirmó que las fotos se las hizo llegar un amigo que estuvo en el hospital, y fue una experiencia horrorosa.
El cubano que le pasó las instantáneas a Rossi indicó que estuvo en el hospital ya que su esposa estaba siendo atendida, y aunque ya recibió el alta médica, debe seguir visitando ese asqueroso lugar.
“Es horrible el vertedero. Ese es el único lugar con agua en toda la sala y es donde las de limpieza botan el agua y friegan los trapeadores”, escribe.
En las duchas, los coágulos de sangre adornan el piso “y ahí pretendían que se bañaran todas”.
Para ofrecer “privacidad”, los encargados del mantenimiento en el hospital amarraron un nylon negro a una estructura metálica.
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El piso del baño está cubierto de papeles, almohadillas sanitarias y otros elementos de uso clínico.
“El salón de operaciones trabaja con el ventilador del aire acondicionado”.
El Hospital Maternidad Obrera fue construido en la primera mitad del siglo XX y fue inaugurado en 1941 por el entonces dictador Fulgencio Batista.
Es considerado como un símbolo de la maternidad en Cuba, pero bajo el comunismo cubano es una muestra más de la desidia que genera este sistema político.
Redacción Cubanos por el Mundo
