Este jueves arribó a Cuba el primer ministro ruso, Dmitry Medvedev, un movimiento que busca incrementar la cercanía entre Rusia y Cuba, en medio de un nuevo periodo especial en la Isla, agudizado por presiones del gobierno de Estados Unidos.
Durante la visita del representante ruso, de acuerdo a un informe de AP, el régimen cubano buscará poder definir acuerdos en los sectores petróleo y transporte, que han sufrido el mayor impacto del nuevo periodo especial, producto del descenso de envío de petróleo desde Venezuela.
Se tiene previsto que suscriban acuerdos comerciales que aún no han sido detallados por ninguna de las dos partes, aunque es bien sabido que Rusia es de los socios comerciales más importantes de Cuba, luego de países como Venezuela, China, España y Canadá.
Este sería el tercer viaje para Medvedev, en el que se reunirá con Miguel Díaz-Canel y visitará un proyecto energético a las afueras de La Habana, así como la restauración del capitolio, cuya cúpula dorada fue una donación de Rusia.
La llegada del representante ruso ha mantenido a la opinión pública atenta, produciéndose en momentos donde Estados Unidos ha incrementado su presión mediante sanciones económicas para que el régimen cubano retire su apoyo al régimen de Nicolás Maduro.
Incluso, el gobierno de Estados Unidos ha advertido a las compañías navieras que trasladen petróleo venezolano a Cuba, además de limitar el envío de remesas hacia la Isla así como los denominados “giros en U”.
Alrededor de 43 mil barriles de petróleo al día son producidos por Cuba pero resultan insuficientes para la realidad de la Isla. El déficit es de aproximadamente 62 mil barriles, que son cubiertos por Venezuela, pese a que desde 2015 había disminuido el envío de crudo.
Redacción Cubanos por el Mundo
