El régimen de Nicolás Maduro, señalado de torturar, encarcelar y asesinar disidentes, logró un puesto en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, lo que para muchos resulta una burla y un desprendimiento de la realidad por parte del organismo internacional.
Esto ocurre mientras Venezuela atraviesa por una crisis política, económica y social, donde el régimen chavista es desconocido por más de 50 países y respaldan a Juan Guaidó, presidente del Parlamento venezolano.
La decisión inclusive le da una “patada” al informe presentado por la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, quien evidenció las precarias condiciones en las que viven los venezolanos, además de especificar que Maduro llevó a cabo unas siete mil ejecuciones extrajudiciales.
A finales de septiembre, el CDH decidió crear “una misión internacional independiente” encargada de investigar las violaciones de los derechos humanos en Venezuela, una medida rechazada por responsables del país sudamericano.
El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, indicó que Venezuela no era un candidato adecuado para ocupar un asiento en el Consejo de Derechos Humanos, pero al parecer nada de eso le importó a la ONU para seguir lavándole la cara a la dictadura venezolana, detalla Infobae.
“La semana pasada, el subsecretario de Estado adjunto de Estados Unidos, Roger Carstens, dijo que le parecía “irónico” que Venezuela buscara un asiento en el Consejo y que esto podría lastrar la “credibilidad” del organismo. El diplomático también expresó su preocupación de que esto pudiera darle a Venezuela una oportunidad de “resguardarse de los esfuerzos de investigación en la ONU”. Estados Unidos se retiró en 2018 del Consejo denunciando el “sesgo continuo” contra Israel y dijo que el organismo era una “cloaca””.
Para Chile, la postulación de Venezuela fue una “burla”.
La ONU reconoce al régimen de Nicolás Maduro, que en cambio no cuenta con el reconocimiento de la OEA donde un delegado de Guaidó ocupa el escaño de Venezuela.
La votación de este jueves afectó en total a casi un tercio de los 47 miembros del organismo.
La composición de este consejo creado en 2006 refleja criterios geográficos con 13 escaños para África, 13 para Asia Pacífico, ocho para América Latina y el Caribe, siete para Europa Occidental y seis para Europa del Este. Sus miembros fueron elegidos por mayoría por la Asamblea General de Naciones Unidas.
Los miembros del Consejo de Derechos Humanos sirven por un período de tres años y no son elegibles para reelección inmediata después de servir dos mandatos consecutivos. Actualmente Latinoamérica está representada por Argentina, Bahamas, Brasil, Chile, Cuba, México, Perú y Uruguay.
Redacción Cubanos por el Mundo