Para el régimen de Cuba resultan “falsas” las denuncias presentadas el pasado mes de junio ante la ONU sobre expatriaciones forzosas de activistas y opositores cubanos desde la Isla.
El hecho fue denunciado por Cuban Prisoners Defenders (CPD), quien indicó que la dictadura cubana usa su aparato represivo para obligar a los disidentes a abandonar el país.
El castrismo presentó un documento donde refuta las denuncias presentadas ante los Relatores Especiales de las Naciones Unidas (ONU) para la Libertad de Opinión y de Expresión; Reunión Pacífica y de Asociación; Defensores de Derechos Humanos; y Derechos Humanos de los Migrantes.
“No existe la figura de la expatriación”, afirma la Isla.”Son falsas alegaciones sostenidas por el señor Javier Larrondo Calafat, en nombre y representación de 71 presuntas víctimas”.
Según el castrismo, tampoco existen los “allanamientos, detenciones arbitrarias, reclusiones extrajudiciales, persecución, hostigamiento, ni intimidación por ejercer pacíficamente cualquiera de los derechos, incluidos los de expresión, opinión, y asociación”.
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Para La Habana resultan “falsedades” las denuncias recogidas y expuestas por CPD, informa Diario de Cuba.
Entre los casos denunciados por CPD están los de Eliécer Góngora Izaguirre y Daniel Lorente Miranda, quienes alegaron haber sido expulsados de Cuba hacia Guyana.
Según la respuesta del régimen, ambos viajaron por “motivaciones personales” a ese país.
“Cuba protege y garantiza el derecho de cada persona a salir al extranjero y retornar”, asegura
El documento además califica a casi todos los 71 denunciantes incluidos en el informe como comisores de delitos comunes.
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Reconoce también que Berta Soler, líder de las Damas de Blanco, no puede viajar porque debe 10.000 pesos en multas: “esta es la verdadera causa por la que se encuentra regulada migratoriamente”, dice.
“La amenaza e intimidación de los ciudadanos, así como cualquier ataque contrario al derecho a la vida o a la integridad personal, están proscritas del actuar de las autoridades cubanas. Si ello sucediere, existen los mecanismos para que la población denuncie tales hechos y sea tomadas las medidas correspondientes”, asegura el régimen.
El régimen cubano demoró más de cuatro meses en entregar su respuesta oficial a un documento que la ONU le había enviado desde junio pasado.
La denuncia de los cuatro relatores de la ONU coincidió con anteriores informes de organismos como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que realizó una relatoría sobre la situación de tales derechos en la Isla; la Organización de Estados Americanos; Amnistía Internacional; Freedom House, entre otros.
Redacción Cubanos por el Mundo