Un cubano fue condenado a 14 años de prisión, luego de que se comprobara su complicidad en un esquema de extorsión a inmigrantes en Nueva York.
Se trata de Francisco Betancourt, taxista cubano, quien aliado con Carlos Hernández, de Connecticut y Lucilo Cabrera, engañaban a inmigrantes en sus taxis en la terminal de Nueva York y los mantenían en el vehículo hasta que sus familiares pagaran un rescate de mil dólares, reporta Daily Mail.
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El taxista cubano recibió la mayor condena, seguido de Hernández quien estará ocho años en prisión por los delitos de secuestro, extorsión y conspiración. La sentencia de Cabrera aún no se produce.
Estos delitos no eran denunciados, porque los familiares que estaban siendo extorsionados, se encontraban en Estados Unidos ilegalmente. En su mayoría, eran de origen guatemalteco y hondureño.
Los inmigrantes eran abordados una vez que se bajaban de los autobuses en la Gran Manzana, forzados a subir a los vehículos y se les impedía irse hasta que sus familiares no pagaran su rescate.
El plan, de acuerdo a uno de los abogados involucrados, no era complejo de ejecutar, considerando la vulnerabilidad con la que llegaban los inmigrantes a Nueva York.
“No solo llegaron en autobuses desde la frontera México / Estados Unidos, sino que también llevaban brazaletes electrónicos atados a sus tobillos, sostenían sobres amarillos brillantes que tenían el mensaje: No hablo inglés. Por favor, ayúdame a encontrar mi autobús”, explica.
Abordaban a hombres, mujeres y niños provenientes de Centroamérica, que no hablaran español y esperaran por asilo en Estados Unidos.
Incluso, llegaron a hacerse pasar por oficiales de inmigración para intimidar aún más a las víctimas.
Redacción Cubanos por el Mundo
