El expresidente boliviano, Evo Morales, anunció que los gastos de su estadía en México comenzarán ya a correr por su cuenta, luego de que se le concediera el asilo, tras su renuncia al cargo de presidente, el pasado 12 de noviembre.
Este miércoles, Morales le pidió a sus “hermanos” mexicanos, así como a los embajadores de otros países, apoyo para su manutención en México, reporta El Universal.
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Durante al menos 15 días, Morales estuvo hospedado en el Campo Militar No. 1 de la Ciudad de México. Ahora se encuentra en una nueva residencia, en compañía de Gabriela Montaño, su exministra de Salud, y del exvicepresidente Álvaro García Linera.
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Pudo conocerse que su seguridad, continuará por cuenta del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
“Desde anoche nos trasladamos a otro lugar, con cooperación, claro. Ahora que salimos del Campo Militar tenemos que comenzarnos a financiar nuestra estadía. Ha sido difícil de encontrar [financiamiento]. Siempre está la cooperación de hermanos de México y también de embajadores de otros países”, dijo Morales.
Ya Andrés Manuel López Obrador, al ser interrogado de los gastos que implicaría para el estado mexicano, la permanencia de Morales en el país, había pedido más “solidaridad”, pues a su juicio, esa interrogante resultaba “mezquina” y no parecida a la identidad nacional de acogida.
Sin embargo, la presión interna de su oposición, podría haber influido, en la aclaratoria a Morales, para que comience a encargarse de sus gastos, mientras continúe asilado en México.
Redacción Cubanos por el Mundo
