Entre policías, lentitud y muchas dudas, así arrancó el experimento del régimen de Cuba en las dos tiendas de La Habana para comenzar a eliminar el Peso Convertible (CUC), al dar vueltos en Pesos cubanos (CUP)
En la tienda de 5ta y 42, en la barriada habanera de Miramar y una de las escogidas para iniciar el experimento, muchos recibieron con asombro la noticia, ya que no sabía sobre la decisión y esperaban recibir a cambio más CUC.
“El vuelto será en moneda nacional y no en CUC”, recibían como respuesta quienes ponían cara de asombro o manifestaban desacuerdo, detalla Diario de Cuba.
Pero la mayoría terminaba por llevarse el producto y aceptar el vuelto en CUP.
A principios de la semana, el Banco Central de Cuba anunció que comenzaría un ensayo para ir dejando de lado el CUC, pese a que no lo informó de manera explícita.
Rayza Díaz, compradora en una de las tiendas seleccionadas para el experimento, indicó que “esto ya me parece el principio del fin del CUC”.
“El resto del dinero que tengo voy a cambiarlo a moneda nacional o en dólares, no vaya a ser que pierda dinero porque no se sabe con cuál noticia te vas a levantar mañana, y temo que se formen largas colas en el banco para cambiar los CUC”, dijo.
La demora al momento de pagar y recibir el vuelto era por culpa de los cajeros, quienes debían estar atentos a las cifras.
“Algunos empleados de las cajas estaban lentos porque tenían que estar más atentos a la máquina registradora en el momento del cambio, y eso hacía más demorada la cola”, dijo Pablo Durrutí
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El usuario indicó que esta medida sirve de mecha para que la gente comience a “soltar el CUC”.
Unas cuadras más arriba, en la tienda de 41 y 42, la otra elegida para el nuevo experimento, todas las cajas señalaban la novedad, pero aun así los cajeros debían aclarar casi constantemente que el vuelto sería en moneda nacional cuando el cliente extendía un billete en CUC.
En esta tienda había menos lentitud pero también menos afluencia de personas que en el centro comercial de 5ta y 42.
“Ya yo sabía de la medida y para las cervezas que quería comprar cambié mi dinero todo a moneda nacional para que no me tuvieran que dar vuelto”, dijo un cliente
En las dos tiendas donde arrancó el experimento, que según el régimen se extenderá a otras según los resultados, había presencia policial para evitar aglomeraciones u otros problemas.
Sin embargo, la jornada transcurrió sin contratiempos.
Redacción Cubanos por el Mundo
