La miseria, la represión y las calamidades es lo único que tienen seguro los cubanos este 2020 bajo el yugo de Miguel Díaz-Canel. El dictador intentó vestir este 2019 de “logros revolucionarios” cuando en las calles de la Isla el panorama es totalmente diferente.
Según detalla CubaNet, los incumplimientos del castrismo en muchos sectores, en especial el de turismo, hace evidente la debacle de la administración que se niega a darse por vencida.
“Entre los incumplimientos más sonados sobresale el del turismo, acerca del cual ya se ha confirmado que no se llegará a la cifra de visitantes extranjeros que se había previsto para el año, con la consiguiente afectación de ingresos en moneda convertible para Cuba”.
Cuba finaliza el año en números rojos. Bajo el mando de Díaz-Canel se incrementó la crisis de combustible, hubo una disminución en la venta de materiales de construcción, se incrementó el déficit de viviendas, se agudizó la escasez de alimentos y ascendió la represión contra disidentes.
“La producción de carne de cerdo decreció en casi 20 mil toneladas; continúa la debacle en los cítricos; y no hubo un avance en la producción de huevos. Esto último es una muy mala noticia para la población, pues se esperaba una recuperación con respecto al 2018 que posibilitara nuevamente la venta liberada de ese producto. En estos momentos el huevo solo se oferta mediante la libreta de racionamiento”.
NOTICIAS RELACIONADAS: Díaz-Canel prioriza la unificación monetaria para tratar repuntar la economía
Desde el ministerio de Finanzas y Precios de Cuba, el panorama para 2020 no es alentador, pero el silencio reina entre sus funcionarios.
El Presupuesto nacional no recibirá la cantidad de ingresos previstos, lo que significa una caída de la circulación mercantil minorista.
“A la postre se trata de una anomalía que podría repercutir desfavorablemente sobre los trabajadores por cuenta propia. Ello obedece a que las autoridades, en aras de captar los ingresos que se escaparon por otras vías, no vacilarían en aumentar los impuestos a los cuentapropistas, así como las exigencias en la ya inminente campaña de Declaraciones Juradas de Ingresos Personales. También se dijo que no habrá mercado mayorista para que los cuentapropistas adquieran sus insumos y materias primas”.
Mientras los problemas económicos crecen, la solución para ellos están lejos de hacerse efectivas. El robo de combustible por ejemplo, es una problemática que viene golpeando a las arcas del Estado desde hace décadas, pero que el régimen no puede o no lo ha querido combatir.
“Además de todo lo anterior, los diputados conocieron de viejos problemas que los directivos de la economía se tornan incapaces de resolver. Quizás el más grave siga siendo el robo de combustible en empresas y entidades. Hasta el cierre de octubre fueron reportadas 218 “irregularidades” en el uso del diesel y otros combustibles. Sin dudas, un modo eufemístico de nombrar la realidad”.
Y para agregarle más leña al fuego, la infraestructura de las empresas del Estado, que deberían estar garantizadas, se encuentran en condiciones paupérrimas lo que incrementa el costo de las operaciones, sobretodo las que se realizan con empresas internacionales.
Por ejemplo, buques extranjeros le generan un gasto a Cuba de 15 millones de dólares extras debido a la sobre estadía de algunos por problemas que se presentan en los puertos cubanos.
“Se mantiene el desfavorable estado técnico operacional de los viales para el acceso y circulación interna dentro de los recintos portuarios. Igualmente, subsiste un déficit en la capacidad de almacenamiento en la economía interna”
El artículo de CubaNet culmina: “Pero el señor Díaz-Canel insiste en que “vamos por más”. Por más calamidades querrá decir él”.
Redacción Cubanos por el Mundo