Mientras en Cuba, la gran mayoría de la población vuelve a cocinar en leña ante la falta de gas licuado y acude a infusiones de hierbas para paliar la escasez de medicamentos, el régimen de Díaz- Canel celebra la apertura en La Habana de un estudio de producción de teleSUR.
Según Díaz-Canel, el traslado del centro de producción es “una respuesta al asedio y a las amenazas de que es objeto teleSUR en estos momentos”.
Añadió, como si se tratase de la producción de frijoles, azúcar o café, que el establecimiento del centro de producción de contenidos era “una necesidad”, del momento actual y “una muestra de unidad, de lo que podemos hacer los pueblos de América Latina y el Caribe si trabajamos juntos”.
Recordemos que el presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, anunció un proceso para “rescatar” la cadena de televisión teleSUR, usada como aparato de propaganda por el comunismo en América Latina.
A través de Twitter, Guaidó anunció medidas “jurídicas e institucionales pertinentes” para llevar a cabo el cometido.
“Tras evaluar las opciones jurídicas e institucionales pertinentes, he tomado la decisión de iniciar un proceso de reorganización y rescate de teleSUR para ponerlo al servicio de la verdad, la pluralidad, la democracia venezolana y regional».
Para Díaz-Canel, las acciones de Guaidó son “perversas”. «Estar agrediendo a un medio y estar lanzando calumnias es perverso, provocador, deshonesto y no tiene base moral ni ética», indicó.
A juicio del mandamás cubano, teleSUR es un canal dirigido para los “latinoamericanos” negando que sea usado para reproducir la propaganda comunista en América Latina.
teleSUR (Televisión de Sudamérica C.A.) fue fundada en 2005 por Hugo Chávez y es propiedad de los Gobiernos de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Uruguay. Además, tuvo sede en Quito y contó con financiamiento del Gobierno de Argentina durante el periodo kirchnerista.
Redacción Cubanos por el Mundo