El pasado viernes, en un vuelo procedente de Miami, fueron deportados a La Habana 119 cubanos por Funcionarios de inmigración.
En los últimos seis meses, se han realizado por lo menos 3 viajes de repatriación a La Habana-Cuba.
La administración Trump se ha concentrado en la repatriación, deteniendo y deportando cubanos indocumentados.
Esta política tuvo su repunte el pasado mes de septiembre, siendo catalogada por la agencia, como una de las misiones de repatriación a Cuba más grande de los últimos tiempos.
Aquel vuelo saliente de Louisiana, en donde se deportaron 120 cubanos a La Habana y que fue considerado como histórico, por su naturaleza y tamaño, se ha convertido en algo regular, según expertos locales de inmigración, ya que los vuelos recientes de repatriación, por lo general, trasladan a por lo menos 100 cubanos a La Habana.
Wilfredo Allen, abogado de inmigración de Miami, afirma que esa cifra ya no representa un impacto para la comunidad.
Muchas de las prerrogativas que tenían los cubanos en Estados Unidos han ido desapareciendo con el paso de los años.
Las políticas de la Casa Blanca de restricción a los viajes a Cuba, la admisión de demandas en los tribunales de los Estados Unidos contra todo aquel que se lucrase de propiedades cubanas que hayan sido confiscadas por el gobierno Castrista, y las sanciones a Venezuela por el envío de petróleo a Cuba han influido.
Según cifras suministradas por funcionarios federales, en el mes de diciembre, en el 2019 se deportaron 1179, contra 463 del 2018, es decir, la cifra de detenidos fue el doble de un año al otro.
La información del ICE, en relación a las detenciones, no es detallada, solo muestra cifras generales. No se tiene conocimiento de cuantos cubanos fueron detenidos y deportados del sur de Florida en los distintos vuelos, ni si eran recién llegados de Cuba o si ya tenían tiempo residiendo de forma ilegal en el país.
El director interino de ICE, Matthew T. Albence, declaró al Miami Herald: “Sí, ahora podemos eliminar a los cubanos. Es por eso que ves un salto significativo”, informó, además, que Cuba, actualmente, está cooperando con los Estados Unidos en la emisión de documentos de viaje, cosa que no hacía en el pasado.
El plan de la administración Trump de deportación de inmigrantes indocumentados, ha rendido sus frutos gracias a las deportaciones selectivas de ciudadanos cubanos, pero es importante señalar que las expulsiones exitosas son el producto del acuerdo firmado entre los gobiernos de Estados Unidos y Cuba, durante los últimos días de la administración del ex presidente Barack Obama.
En el convenio de migración del 12 de enero de 2017, el gobierno de Cuba está obligado, a partir de esa fecha, a recibir a los ciudadanos cubanos procedentes de Estados Unidos que hayan estado de forma ilegal en ese país.
El convenio entre Estados Unidos y Cuba, señala “Los Estados Unidos de América regresarán a la República de Cuba, y la República de Cuba recibirá a todos los ciudadanos cubanos que … las autoridades competentes de los Estados Unidos determinen que han intentado ingresar o permanecer en ese país de manera irregular en violación de la ley de los Estados Unidos”.
Este convenio internacional eliminó al “pie mojado, pie seco” que consistía en permitir a los cubanos que ingresaban a los Estados Unidos sin visa, permanecer en el país y legalizar su situación.
Aún así, Cuba puede aceptar o rechazar a sus nacionales que hayan emigrado a Estados Unidos antes de la firma de dicho convenio. Cuba tiene un lapso de 90 días, contados desde que son contactados por funcionarios estadounidenses, para admitir u oponerse a la devolución de alguno de sus ciudadanos. De ser admitido, ICE debe liberar a la persona, otorgándole una “orden de supervisión”, quien deberá registrarse todas las veces que el gobierno así lo requiera.
A la fecha del 31 de agosto, en Estados Unidos alrededor de 39000 cubanos, están sometidos a órdenes de expulsión por condenas penales o violaciones de inmigración. Muchos de ellos están amparados por las órdenes de supervisión, y deben registrarse por lo menos una vez al año.
Redacción Cubanos por el Mundo