Pese a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de evitar viajes internacionales y mantenerse en casa, la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, viajó de nuevo a Cuba, donde ya se reportan, de forma oficial, cinco casos de infectados por coronavirus.
Fernández de Kirchner se trasladó para ver a su hija Florencia, quien recibe tratamiento médico desde hace un año en la Isla, detalla la agencia EFE.
Según fuentes de su entorno político, la expresidenta de Argentina realizó su décimo viaje a Cuba a bordo de un vuelo regular de Cubana de Aviación y tiene previsto regresar al país gaucho a inicios de la semana que viene.
La decisión de la vicepresidenta llega luego de que el presidente del país, Alberto Fernández, informara que cerrara las fronteras del país por al menos 15 días para evitar la propagación del coronavirus.
Esta decisión, que está precedida de la suspensión de la llegada de vuelos de Europa, Estados Unidos o China, en los que la propagación del virus se está efectuando con mayor rapidez, conlleva que no podrán ingresar al país salvo los argentinos nativos o los extranjeros residentes en territorio nacional.
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Sin embargo, el gobierno argentino no considera que Cuba sea un país de riesgo por coronavirus.
El 14 de marzo de 2019 Cristina Fernández viajó a la Isla por primera vez para visitar a Florencia Kirchner, quien recibe allí tratamiento contra un supuesto trastorno de estrés postraumático y otras problemas secundarios como bajo peso corporal y linfedema ligero en las piernas.
No obstante, para la oposición política de Fernández, Florencia elude en Cuba deudas pendiente con la justicia argentina que serían cobradas durante el mandato del expresidente Mauricio Macri.
Redacción Cubanos por el Mundo
