En cadena nacional desde Managua, y tras 34 días sin comparecer en público, reapareció este miércoles el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega.
Daniel Ortega, comenzó su intervención en cadena nacional enviando un mensaje de “solidaridad y condolencias a quienes están sufriendo” por la pandemia del covid-19.
En este sentido, el mandatario que había desaparecido pese a la crisis de coronavirus que asecha el país, llamó “a la solidaridad y la unidad de los pueblos del mundo”.
Ausente de actos en público desde el 12 de marzo, la desaparición pública de Ortega había generado gran incertidumbre y cuestionamientos sobre su paradero e incluso su estado de salud.
Sin embargo, el mandatario sandinista no explicó las razones de su prolongado extravío, durante su alocución.
Buena parte de la población nicaragüense y organismos internacionales criticaron la ausencia de liderazgo en el país pese a la gravedad de la pandemia actual, y especialmente por la gestión que el gobierno está realizando frente a la pandemia de covid-19.
Daniel Ortega y Nicaragua, en la mira de la OMS por su tratamiento al COVID-19
La estrategia nicaragüense se caracteriza por la ausencia de medidas habituales en otros países como el cierre de fronteras, cuarentenas obligatorias, cancelación de eventos masivos o de clases en las escuelas.
La propia Organización Mundial de la Salud (OMS), confesó su “preocupación” por la gestión frente al coronavirus de Nicaragua, que hasta este miércoles reporta oficialmente un fallecido y nueve casos positivos.
Pese a que Ortega hizo de la pandemia su principal tema durante el mensaje a la población que ofreció este miércoles, no apagó las inquietudes de los nicaragüenses sobre la política de su Gobierno frente al coronavirus.
En este sentido, descartó decretar cuarentena argumentando razones económicas, ni aislamiento social como recomienda la OMS.
Tampoco ofreció a su nación un lineamiento o plan claro para prevenir el brote del virus y en cambio criticó las “bombas nucleares” en un momento que la humanidad batalla contra la letalidad del covid-19.
Es de recordar que durante la ausencia de Ortega, fue su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, quien ejerció como voz oficial del gobierno de Nicaragua.
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Redacción Cubanos por el Mundo