En medio de la pandemia del COVID-19, para el régimen cubano se hace más importante hacer propaganda y se deja en un segundo plano la salud de algunos de los infectados.
En relación al brote de contagios en el Polígrafo de Villa Clara, donde se imprime la propaganda oficialista cubana, hasta la mañana del viernes, sumaban 13 los casos positivos, mientras que las operaciones continuaban en la empresa. Los empleados están viviendo dentro del poligráfico, según imágenes que la propia prensa castrista ha divulgado.
Cabe destacar que los contagiados son cinco trabajadores, y ocho corresponden a familiares que aparecen como contactos, por los que se mantienen bajo vigilancia a más de 300 personas.
La prensa izquierdista destaca que las investigaciones continúan en relación al brote, donde reseñan que Jorge Enrique Veitía Fernández, director de la Empresa de periódicos UEB Gráfica de Villa Clara Enrique Núñez Rodríguez, fue quien logró percatarse del evento epidemiológico cuando una persona presentó un cuadro catarral, y al comprobar las manifestaciones le indicó que asistiera de inmediato a su institución de Salud.
“A partir de ese momento le hacen los exámenes correspondientes y da positivo. Al ser el jefe de un turno, con 19 trabajadores bajo su guía, todos fueron aislados de conjunto con familiares y contactos”.
indicó Veitía Fernández.
Ante la ola de contagios dentro de la imprenta de propaganda había dos opciones: cerrar la entidad, y dejar que los empleados recibieran el tratamiento para vencer a la COVID-19 en un centro sanitario con todas las garantías; o encerrarlos dentro del Poligráfico, para que continuaran imprimiendo la propaganda del régimen, aun enfermos.
La primera opción habla de los protocolos que hay que seguir para tratar el síndrome viral, la segunda trata sobre complacer a la dictadura, cueste lo que cueste. Obviamente, la primera no era una alternativa, los 70 trabajadores, continúan sus labores, bajo un supuesto acuerdo.
«Los 70 trabajadores escogimos la segunda variante, todos estuvimos de acuerdo. Creamos un centro de aislamiento dentro de la propia empresa con un solo turno de trabajo, que lleva ocho días en impresiones todas las noches y sin descanso”,
dijo el director de la empresa.
¿El resto de trabajadores que no tiene COVID-19 también está expuesto a contraer la enfermedad?
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En este sentido, Veitía afirma que dentro de la institución se cumple una cuarentena, bajo condiciones que se han adaptado en relación a insumos y alimentación, camas, colchones, módulos de aseo, útiles de limpieza, y un comedor improvisado .
El Dr. Neil Reyes Miranda, director del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología (CPHEM), dijo que la investigación sobre posibles contagios incluye a alrededor de un centenar de obreros de la propia industria gráfica y unos 114 de la entidad cercana, por lo que es probable que la cadena de contagios continúe.
De igual forma a un grupo vinculado a la Empresa de Correos, al formar parte de la cadena que interviene en el proceso de distribución de la propaganda, y a los familiares de cada uno, e incluso, a visitantes que, por razones laborales, están vinculados al Poligráfico.
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