La producción de cerdo en Cuba se ve mermada, según la prensa oficial, por la falta de alimento para los animales. Al menos esta es la deficiencia presente en la provincia de Ciego de Ávila que impacta a los criadores privados que entregan su mercancía a las autoridades en la provincia, encargados en la distribución.
La falta de pienso ocupa ahora a los productores locales dada la alta dependencia en Cuba de las importaciones en distintos rubros, que inciden en el abastecimiento de los comercios. En el caso puntual de esta provincia, se estima que dejaron de producirse aproximadamente cuatro mil toneladas de cerdo de lo que se suponía era el requerimiento poblacional.
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Actualmente, al menos 174 representantes privados se hacen cargo de la cría de cerdo para surtir al mercado nacional. Cita la Agencia Cubana de Noticias a la directora de la Empresa Porcina local, Yandira Sánchez, quien como es costumbre culpó al embargo estadounidense en el surgimiento del maíz y soya, además de reconocer que existen deficiencias en la inversión nacional para la producción de cerdo. Esta falla en el proceso de cría y engorde, incide directamente en la oferta de los mercados cubanos.
Sigue siendo una asignatura pendiente para los productores de cerdo en Cuba, conseguir suplentes a la hora de alimentar a los animales. Plantean desde las autoridades provinciales utilizar otras alternativas, a largo plazo claro está, como la yuca y otros alimentos, que combinados sustituyan al importado, aunque mientras no se aclara cómo se resolverá la deficiente oferta en los mercados cubanos que deja, en medio de una pandemia, a la población haciendo kilométricas colas para adquirir productos de primera necesidad.
Otros productores se van por opciones como derivados lácteos, usando suero para el proceso de preceba de los cerdos, aunque hay quienes urgen la definición de áreas de siembra de viandas para nutrir a los animales.
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Mientras, la alternativa es el “rendimiento”. Sí, maximizar los derivados productos de la poca oferta de carne de cerdo, y en vez de ofrecer costillares, piernas o lomo, que en los mercados los cubanos accedan a picadillos y embutidos. Quizás a croquetas explosivas de dudosa procedencia, por mencionar otro ejemplo.
Pero ocupa a las autoridades cubanas que se reactive la llegada de turistas extranjeros y no tengan capacidad de producción para atenderlos.
Redacción Cubanos por el Mundo
