La vida le cambió de un momento a otra a una joven que al sentir, lo que ella suponía que era un fuerte dolor menstrual o cálculos en los riñones, no solo se enteró que tenía un embarazo, sino que también había estaba en pleno proceso de parto.
El insólito hecho ocurrió en Illinois, Estados Unidos el 23 de junio de 2019, cuando la joven Lizzie Quah, de apenas 23 años, comenzó a sentirse muy mal, con unos fuertes dolores que llegó a penas que eran “los peores calambres menstruales” o quizá un cálculo renal.
Una vez que Quah llegó al hospital y fue examinada por los médicos, se enteró que estaba embarazada y en parto, algo que siquiera se cruzaba por su cabeza; pero unas horas después tenía a su bebé en brazos.
“No me pusieron anestesia epidural porque era demasiado tarde para ayudarme. Tenía un dolor insoportable, no tenía idea de si iba a tener un niño o niña, un bebé a término o prematuro, sano o enfermo”,
reveló la joven en una entrevista.
HEADLINE HIT at 07:35 – A song this morning for Lizzie Quah from Illionois who only discovered she was pregnant hours before giving birth.https://t.co/2Pmsnh49Up
— Wave 105 (@wave105radio) May 28, 2020
La sospecha de la mujer, se debía que, en días pasados había desarrollado un cálculo renal.
Se conoció, que cuando la joven llegó al recinto de salud, los médico iba a suministrarle unos calmantes, para aliviar su dolor, sin embargo, minutos antes decidieron realizar un examen físico para asegurarse de que no estaba embarazada, pero sí lo estaba y en proceso de parto.
“Resultó que estaba de parto activo y tuve un bebé esa noche”,
dijo Lizzie, explicando lo asombrada que estaba con la repentina noticia.
Pese a que no se preparó, ni estuvo en tratamiento de gestación durante el embarazo, Quah tuvo una pequeña niña totalmente sana, a quien llamó Winnie June.
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