La producción nacional no existe en el vocabulario de los comunistas, que solo se dedican a nacionalizar las empresas para luego destruirlas causando una grave escasez de alimentos como la que se vive en Cuba.
Un ejemplo de ello llega desde la ciudad de Matanzas, específicamente en el reparto Versalles, en donde se reporta la existencia de un organopónico en total abandono.
La denuncia fue hecha por un cubano de nombre Carlos Yurievich Luis Ortega a través del medio castrista Juventud Rebelde, el cual expresa que, la queja publicada el pasado 24 de mayo, aún no ha recibido una respuesta de las autoridades.
A esta queja, se le suma otra denuncia también desde Matanzas. Esta proviene de Torriente en el municipio Jagüey Grande, en donde el organopónico lleva dos años produciendo solo malas hierbas, según explicó el cubano Sergio Luis Pérez.
“Primero lo atendían los reclusos que estaban próximos a extinguir su sanción, y lo destruyeron. Después estuvo mucho tiempo sin producir porque se robaron la turbina que abastecía de agua los cultivos. Y un buen día desaparecieron los trabajadores estatales que laboraban en él con bajos salarios”.
A nadie le duele la escasez y falta de producción
El mismo cubano que hace la denuncia, aseguró que, esta situación de los organopónicos “a nadie le duele” y los únicos afectados son los pobladores al momento de adquirir alimentos en Cuba.
«En conclusión, que a nadie le duele y es la población la afectada pues, aunque se adquieren algunos productos en los mercados estatales y a través de los trabajadores por cuenta propia que venden más caro”.
“Es necesario que en medio de la situación de la COVID-19 se reanime la producción de vegetales y hortalizas que tanto el pueblo demanda”.
Sentenció el cubano.
Es importante recordar que, las colas para comprar alimentos en Cuba siguen siendo una constante en la isla en tiempos de Covid-19.
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Redacción Cubanos por el Mundo
