La esperada noticia de un vuelo humanitario llegó para repatriar a los más de noventa cubanos varados en Nicaragua. Sin embargo, es una noticia entre amargo y dulce, pues la gran mayoría no tiene cómo costear el boleto de vuelta a casa, luego de tres meses de agonía y espera en Managua.
“Tuve que mandar a vender unas cosas de mi casa en Cuba para ver si alguien en Estados Unidos puede pagarme el pasaje y yo le doy el dinero a su familia en Cuba”, contó uno de los cubanos varados en Nicaragua en entrevista con Cubanos por el Mundo.
Están, según confiesa, sacando candela (dinero) “de donde no hay”, porque volver a casa es urgente. Luego de estar por casi tres meses varados en tierra lejana, sin trabajar y consumiéndose lo poco con lo que volverían a Cuba, su panorama se puede hacer aún más difícil si no vuelven en el viaje habilitado para el próximo 3 de julio.
“El que se quede este viaje se le complica más la situación”, explica el entrevistado, en relación a la prórroga de permanencia que han tenido que ir renovando mes a mes, a pesar de que continuar en el país no es una decisión propia.
Conversando vía telefónica para Cubanos por el Mundo, otro confiesa sentirse por un lado apuntado con un cuchillo y por el otro “una pared llena de dagas”, pues aunque desean volver cuanto antes al país, debido a su situación legal y la familia que tienen en la isla, no tienen cómo pagar el precio del boleto gestionado por Viva Aerobus.
“Y posiblemente también sería un problema para los cubanos que están en los albergues que crearon, porque no podían sostener esa situación y parece que están en la calle nuevamente”, dice el entrevistado en alusión a una medida lograda tras las denuncias públicas sobre el difícil escenario de los varados en Nicaragua.
El vuelo de Viva Aerobus, gestionado por la Agencia Merely Tours, con la aerolínea Vivaaerobus, y las embajadas y consulados de Cuba en México y Nicaragua, fue anunciado por la Asociación de Cubanos Residentes en Nicaragua para el 30 de junio, sin embargo, la operadora lo anuncia para el 3 de julio. Ya el vuelo había sido cancelado el 19 de junio, fecha en la que se suponía volaría a La Habana.
Aclara el anuncio de la organización cubana en Nicaragua, que “el carácter humanitario de este vuelo, está dado por su propia ejecución, en momentos en que no existe aún movimientos de la aviación comercial, por lo que el boleto de regreso tiene un costo”, cuyo costo superaría los 350 dólares.
Algunos cubanos han conversado desde el pasado mes de mayo en exclusiva para Cubanos por el Mundo, con el compromiso de no divulgar sus identidades, pues temen represalias al volver a la isla.
Redacción Cubanos por el Mundo
