El científico cubano Ariel Ruiz Urquiola ya tiene su derecho de palabra para el próximo 2 de julio, en audiencia sin intermediarios, ante la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Sin embargo, advierten que el régimen cubano podría intentar callar su participación, por lo que desde el movimiento Somos+ piden a UN Watch, organización no gubernamental que representará al también activista, estar atenta.
Nos sobran motivos para pensar que la delegación del régimen pierda la compostura diplomática para boicotear la presentación de Ariel Ruiz Urquiola.
Hacemos un llamado a @UNWatch para tomar las medidas necesarias para prevenir tales actos.#Justice4Ariel #Justice4Urquiola pic.twitter.com/22UA4QkS4m— Somos+ Uruguay (@somosmasuruguay) June 30, 2020
Sin haberse cumplido las 24 horas de que a Ariel Ruiz Urquiola le entregaran el pasado viernes la confirmación de su participación ante la ONU, y con ello levantara la huelga de hambre, sed y medicamentos que sostuvo durante cinco días en las cercanías del Palacio de Wilson, el mandamás cubano, Miguel Díaz-Canel, enviaba una comunicación al Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, donde hablaba de supuesta “colaboración internacional”, en momentos donde considera así lo necesita el mundo.
Aunque en la carta, no hace referencia al caso Ruiz Urquiola, sí habla de emprendidas de “guerras no convencionales y la manipulación y politización de los derechos humanos y el irrespeto a la libre determinación de los pueblos”. Acto seguido, las cuentas en redes sociales controladas por el régimen cubano, se activaron para expresar su inconformidad con el logro de Ruiz Urquiola, mancillando su reputación y calificando su protesta pacífica ante la ONU como un “show”.
El accionar represivo del régimen cubano es bien conocido en la isla. Pero además, su historial para callar las voces en el exterior también, como hiciera en octubre de 2018 para evitar que Estados Unidos ante la ONU abordara la dramática situación de los presos políticos en Cuba.
Entonces, la misión del régimen cubano, encabezada por su embajadora, Anayansi Rodríguez, valiéndose de gritos y golpes contra las mesas, en un acto muy distante del carácter diplomático de la institución, saboteó la campaña para alertar la realidad de más de un centenar de cubanos.
El triunfo de Ariel Ruiz Urquiola constituyó en sí una victoria para el pueblo cubano, al tratarse de una audiencia lograda para exponer las violaciones de los derechos humanos en contra de su familia, incluyendo el atentado contra la salud y vida de ambos, una representación de toda la población cubana.
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Raúl Redacción Cubanos por el Mundo
