En la espera por el nacimiento de su primer bebé, una gorila en peligro de extinción del zoológico de Nueva Orleans, ha estado entrenando con un “muñeco” para sostener a su próxima descendencia.
Debido a que un peluche podría romperse con facilidad, el juguete de entrenamiento de Tunami, de 13 años, no se parece en nada a un gorila, sin embargo, le ha servido para practicar; según informó el veterinario jefe del zoológico de Audubon, el Dr. Robert McLean.
Para crear este “muñeco” se emplearon unos tubos de lona para manguera de incendios, los cuales son resistente y se han tejido con las dimenciones y el peso aproximado de un gorila recién nacido, de al menos 4 libras.
“No lo he visto yo mismo (… ) Aparentemente es bastante feo pero hace el trabajo”,
dijo el veterinario.
Tumani, el padre de la cría Okpara y las hembras Alafia y Praline, son de una especie de gorilas de las tierras bajas occidentales, que están en peligro de extinción. En 2019 se estimaban al menos una 362 mil especies en estado salvaje, pero sus números han caído en un 2.7 por ciento al año, lo que los pone en situación vulnerable, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Al ritmo anteriormente expresado, para 2082 podría haber una reducción del 80 por ciento; la pérdida del hábitat, y virus mortales incluido el Ébola, y la caza ilegal , son los indicadores de la reducción de la población de este animal.
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Cerca de 350 gorilas de este tipo están metidos en instalaciones que están acreditadas por la Asociación de Zoológicos y Acuarios. La última especie de este tipo que nació en este zoológico fue Praline, que en la actualidad tiene 24 años.
El embarazo de Tumani de al menos 160 libras, va bien hasta el momento, por lo que el zoológico de Nueva Orleans quiere mantener a la población informada sobre el progreso. Está recibiendo atención médica y constantes ultrasonidos y capacitación para cargar al bebé y amamantarlo,
Se estima que el nacimiento podría ocurrir entre mediados de julio y el 20 de agosto. Se desconoce el sexo del gorila bebé que es producto del apareamiento entre Tumani y Okpara, un espalda plateada de 26 años, que vive en dicha instalación desde el 2017.
“No queremos al bebé solo. Lo queremos con la madre en todo momento (…) Si el bebé está en el suelo, queremos pedirle que lo recoja”,
explicó McLean.
El entrenamiento de la gorila también se basa en enseñarla a jugar con un biberón, además de una manguera flexible que se conecta a su pezón por si llega a tener problemas para lactar.
La otra gorila, Alafia ha criado con éxito a un bebé, luego de recibir un entrenamiento similar y también está siendo preparada por si tiene que intervenir como madre adoptiva.
