La obra de cristal más grande del mundo, que tardó unas 500 horas en construirse, vio su final en tan solo unos segundos, luego de que unos niños terminaran destrozándola.
La espectacular estructura, creada por el vidriero español Miguel Arribas, era un castillo de cristal que representaba el castillo de la Cenicienta de Disney y estaba valorada nada más y nada menos que en 64 mil dólares.
La escultura de cristal que tardó 500 horas en realizarse para luego ser considerada la más grande del mundo, se encontraba en el Museo del Vidrio de Shanghái en China, pero sufrió serios daños luego de que dos niños que estaban en las instalaciones, violaron la cinta de seguridad que bordeaba el monumento y tropezaron con una vitrina que la protegía provocando que el castillo se rompiera por completo.
Según los medios locales, el hecho que tuvo lugar el pasado mes de mayo fue notificado por el museo a Miguel Arribas para saber si él podía reparar el daño. Entre tanto, los padres de los niños responsables del desastre se disculparon y se comprometieron a cubrir los gastos del arreglo del castillo que fue regalado al museo de Shanghái en el año 2016, por la celebración de su quinto aniversario.
Esta impresionante obra en vidrio soplado, considerada la más grande del mundo, estaba compuesta por aproximadamente 30.000 partes individuales hechas a mano y pesaba más de 60kg, además de contar en sus torreones con agujas hechas con oro de 24 quilates.
Ahora el museo debe esperar que concluya el confinamiento determinado por la pandemia de coronavirus, para retomar sus actividades y recibir a Arribas, quien manifestó que por la suspensión temporal de vuelos, no puede llegar al continente asiático para reparar el daño.
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Redacción Cubanos por el Mundo
