Quién paga por lo mal hecho, la pregunta que se hacen con frecuencia los cubanos y recientemente por lo ocurrido en la calle G de La Habana. Reaccionando a la manifestación del Instituto de Planificación Física, usuarios en redes sociales cuestionaron que nuevamente se informe sobre las deficiencias de una obra y su “echada para atrás”, cuando ya se han invertido recursos, que buena falta hacen para otras áreas – o al menos eso arguyen cada vez que se solicita ayuda social para viviendas en riesgo de derrumbe, por citar ejemplo -.
“¿Y hay que esperar a que el trabajo esté terminado? Que el gasto en materiales y recursos sea mayor y que los ciudadanos comiencen a protestar en las redes sociales para darse cuenta que está mal hecho. Esta historia está muy mal contada. Ay Ciudad Maravilla si seguimos así te perdemos pronto”, escribió la usuaria Yeni Careaga.
Por su parte la usuaria Ileana Stiefel, argumentó que una obra de este tipo “no se hace de un día a otro”, por lo que pudieron haberse dado cuenta mucho antes, sin que avanzara tanto. “¿Nadie de los designados pasó por esa zona? ¿Nadie vio o pensó que eso no estaba bien?” explicó sobre lo ocurrido en la calle G de La Habana.
Dándole la relevancia que nuevamente tuvo para los cubanos las redes sociales, el usuario Orlando Ariel Gener dijo: “Sería relevante q se reconociera la importancia de la presión desde las redes. Todos aquellos que les molestan los comentarios q se publican denunciando TODO lo que nos parezca desastroso (encima sin previa información) deben reconocer que sin haber utilizado el único medio disponible para emitir criterios y ejercer presiones de esa manera (pacífica) a veces funciona. Es otra VICTORIA de las redes sociales” mencionó.
Dadas las necesidades de reparación y recuperación de cientos de edificios en La Habana, sin adentrarse aún en el resto del país, se preguntó Yoslaine Fiallo: “Hay tanto material en Cuba para desperdiciarlo de esa manera? Primero fue el muro de 1ra y 70 y ahora esto. Por favor, se están cayendo las casas en La Habana y los gobiernos de los municipios o no se quien jugando a las casitas con los materiales que podrían hacer la diferencia para muchas familias en esta ciudad. Cada vez me decepciono más”.
La obra fue calificada por el Instituto de Planificación Física como una “violación”, para la que a la fecha no se reportan responsables, solo el retroceso de la medida en la calle G, tal y como ocurriese con el levantamiento del muro en 1ra y 70, del paseo marítimo de La Habana.
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Redacción Cubanos por el Mundo
