La brigada de médicos cubanos Henry Reeve se hace “merecedora” del Premio Nobel de la Paz, según afirmó un grupo de galenos que ejercen en misiones desde Chile. De tal manera, el próximo 13 de agosto se hará la presentación de la solicitud a nivel mundial para que los esclavos del régimen opten por el reconocido galardón.
La brigada médica Henry Reeve, conformada actualmente por casi 50.000 médicos cubanos, repartidos en todo el mundo, fue creada en el año 2005 por el fallecido dictador Fidel Castro, quien, con la certeza del apoyo requerido por países en situación de desastre natural, vio la oportunidad perfecta para comercializar a sus galenos al mejor estilo de una trata de blancas.
Desde entonces, muchos países han realizado convenios con Cuba para recibir asistencia médica. Actualmente, con la crisis de salud que enfrenta el mundo entero por la pandemia de covid-19, esta brigada de médicos cubanos ha hecho acto de presencia donde ha sido requerido y el régimen cubano ha podido llenar sus bolsillos a costa de la necesidad ajena y la explotación de su personal de la salud.
Chile particularmente, ha iniciado la tarea de brindar un reconocimiento mundial a la labor desempeñada por estos esclavos y están solicitando el respaldo de todas las naciones que han sido beneficiadas para que este año les sea otorgado el Premio Nobel de la Paz, solicitud que se concretará el próximo 13 de agosto.
Hasta la fecha ya se han recaudado miles de firmas en apoyo a esta causa; organizaciones políticas y no gubernamentales de Chile se han sumado, así como también diversas organizaciones y asociaciones, personalidades destacadas y hasta la propia ciudadanía ha manifestado su simpatía hacia la propuesta
Pero la realidad de estos profesionales es muy distinta a la que quieren pintar; si bien buscan posicionarlos como los héroes de la salud, la verdad es que son más mártires que cualquier otra cosa. Incluso hasta hace poco Human Rights Watch (HRW), reveló en en un informe donde aseguró que el régimen cubano vulnera los derechos fundamentales de estos médicos esclavos que despliega por el mundo y que ahora pretenden premiar con un Nobel de la Paz.
Es de mencionar que en caso de recibir el importante reconocimiento, ojalá y puedan verlo siquiera, porque si el gobierno se va a apoderar del mismo, como hace con los sueldos, sería muy triste que ni el premio reciban.
Según investigaciones realizadas por el departamento de estado de los EE.UU, entre el 75 y el 90% del sueldo mensual de un médico cubano es retenido por el régimen. Es decir, los países que requieren asistencia médica cubana establecen un contrato por prestación de servicios profesionales con el gobierno cubano, donde se establecen los términos tales como el sueldo a devengar por cada profesional de la salud. El país receptor del servicio realiza el pago acordado al propio gobierno y estos a su vez son los encargados de cubrir las nóminas con sueldos miserables establecidos según el régimen que no les permiten ni siquiera, acceder a una pieza de alquiler digna en el país donde se encuentra.
Y pues no hay opciones para el que esté en desacuerdo; ya que aquel que ha decidido manifestarse y desertar, ha tenido que enfrentarse a amenazas por parte del régimen, retención de documentos, prohibiciones de salida del país para el propio profesional o sus familiares, además de una cantidad de acciones controladoras y coercitivas.
Deberían ciertamente recibir un premio, pero no por la paz, sino por sobrevivir a la represión y a la explotación a la que son sometidos por el régimen castrista, y la dictadura también debería recibir un Nobel pero del abuso y el atropello.
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Redacción Cubanos por el Mundo