90 sacos de harina de trigo que iban a ser utilizados para la elaboración de panes, le fueron decomisados a un cueentapropista de Holguín, por el régimen cubano a través de la policía cubana, alegando que los productos fueron comprados de manera ilícita.
Por este hecho, están bajo investigación el chofer de un camión, un jefe de almacén, un despachados y dos braceros, por supuesta complicidad en los supuestos delitos por lo que está siendo señalado el dueño del restauran al que le quitaron la mercancía.
Un reporte de la prensa castrista indica que, los 90 sacos de harina de trigo se adquirieron mediante unos trámites que estaban alterados, por lo que el almacén El Expreso, de la Cadena Cubana del Pan hizo entrega del mismo; sin embargo, la irregularidad de detectó cuando los productos fueron a distribuirse al mercado informal y había un déficit.
En este sentido, seis personas están siendo señaladas por “apropiación indebida” , por lo que mientras fluye la investigación están bajo instrucción penal y en espera de juicio.
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Este es otro de los tantos informes de la prensa castrista, que califica a los trabajadores por cuenta propia como delincuentes, mientras que son cubanos que buscan la manera de llevar el sustento a sus hogares, utilizando otras alternativas de empleo, ya que con los sueldos de los trabajos formales, no se puede pagar el alto costo de la vida en Cuba.
El “puesto a dedo” Miguel Díaz-Canel ordenó a enfatizar las operaciones para detectar estas supuestas ilegalidades, desde el brote de la pandemia, para achacarle al pueblo la culpa del desabastecimiento que se ha incrementado en los últimos meses.
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Redacción de Cubanos por el Mundo
