La Policía Nacional Revolucionaria (PNR) no descansa y sigue arremetiendo en contra de trabajadores y comerciantes que manejan comestibles e insumos. Esta vez atraparon a dos chóferes de la empresa de transporte del Ministerio de la Construcción (MICONS) y procedieron con el decomiso de cabilla en Granma.
De acuerdo con las acusaciones en el canal del estado los empleados del MICONS estaban transportando 3.300 kilogramos del material de construcción con fines personales.
Decomiso de cabilla en Granma
Los oficiales aseguraron a los medios oficialistas que la carga de los dos camiones “no coincidían” con lo establecido en las partidas de entrega y se sumó que había presuntas irregularidades en los sellos.
Según los señalamientos los dos chóferes tenían que llevar la cabilla hasta la empresa comercializadora Escambray de la provincia de Santiago de Cuba pero sus planes eran “apropiarse” de todo. Además, enfatizaron que intentaron “sobornar” a los oficiales de la PNR para lograrlo.
“Somos padres de familia, vamos a arreglar esto. Diez mil para cada policía”.
Contó el funcionario.
Se presume que los oficiales de control se interesaron en el contenido de los camiones por lo que los chóferes notaron que sería decomisada la cabilla inminentemente.
Ante esto trataron de negociar para proteger su trabajo. Una practica que es frecuente en Cuba ante la intensa presión del régimen y la corrupción del sistema. Destaca que hecho de que las autoridades, en medio de la pandemia, buscan formas de hacer creer a los cubanos que están luchando en contra de los acaparadores y revendedores.
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Los implicados ya son acusados de actividad económica ilícita sin una adecuada investigación del caso y comprobación de documentos. Se especula que serán acusados de otros cargos por delitos en contra de la economía del país.
Cubanos por el Mundo