El cubanoamericano Máximo Álvarez participó en la Convención Nacional Republicana del pasado 25 de agosto y fue contundente sobre su postura hacia el comunismo debido a su experiencia personal en Cuba.
Contó que a sus 13 años, en el año 1961, logró llegar a Estados Unidos.
Cubanoamericano en Convención Nacional Republicana
Álvarez actualmente vive en la ciudad de Miami es dueño de la Sunshine Gas Distributors. Fue uno de los latinos que dio su testimonio sobre los “horrores” que se viven en las dictaduras y acompañó al presidente Donald Trump en el acto.
“Mi nombre es Máximo Álvarez. Les hablo hoy desde mi casa en el sur de Florida, no lejos del Estrecho de Florida, que no es solo una franja azul de 90 millas de ancho en un mapa para mí. Divide la libertad del miedo. Divide el pasado, del futuro”
comenzó su discurso el cubano.
“Sé todo sobre el pasado, nunca olvidaré el mío. Mi familia ha huido del totalitarismo y el comunismo. Y más de una vez. Primero de España, luego de Cuba, señaló a continuación.
“Por la gracia de Dios, he vivido el sueño americano,” expresó Máximo y luego lo llamó “la mayor bendición que he tenido.”
Luego, al hablar de la izquierda y su empuje en EE.UU., dijo que él “había visto eso antes”.
“Les hablo hoy porque he visto (…) movimientos como este antes. He visto ideas como esta antes y estoy aquí para decirles que no podemos dejar que se apoderen de nuestro país.”
Luego, fue a la yugular del problema: Fidel Castro, el principal responsable de que las ideas comunistas estén en boga en el continente.
“Escuché las promesas de Fidel Castro. Y nunca podré olvidar a todos los que crecieron a mi alrededor, que se parecían a mí, que pude haber sido yo, que sufrieron, pasaron hambre y murieron porque creyeron en esas promesas vacías”, sentenció el cubano americano.
“Escucharon las promesas vacías y conocen la realidad,” continuó expresando.
“Míralos. Escúchalos. Conozca la verdad. Esas falsas promesas (repartir la riqueza, desfinanciar a la policía, confiar en un estado socialista más que en tu familia y comunidad) no suenan radicales a mis oídos. Suenan familiares.”
“Cuando le preguntaron a Fidel Castro si era comunista, dijo que era católico romano; sabía que tenía que ocultar la verdad. Pero el país en el que nací se ha ido, está destruido. Cuando veo las noticias en Seattle, Chicago y Portland, cuando veo que se reescribe la historia, cuando escucho las promesas, escucho ecos de una vida anterior que nunca quise volver a escuchar. Veo sombras que pensé que había dejado atrás.
“Estoy muy agradecido con Estados Unidos, el lugar donde pude construir mi sueño americano a través del trabajo duro y la determinación. El presidente Trump sabe que la historia estadounidense fue escrita por personas como usted y yo, que aman a nuestro país y toman riesgos para construir un futuro para nuestras familias y vecinos.”
Momentos antes de finalizar expresó:
“Ahora mismo, depende de nosotros decidir nuestro destino y elegir la libertad sobre la opresión.
El presidente Trump está luchando contra las fuerzas del socialismo, el comunismo y el totalitarismo. Y seguirá haciendo precisamente eso. ¿Y qué pasa con su oponente y el resto del pantano de DC? No tengo ninguna duda de que entregarán el país a esas fuerzas peligrosas.
Tú y yo decidiremos. Y esto es lo que he decidido: elijo al presidente Trump porque elijo a Estados Unidos.”
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La intervención de Álvarez es parte de la campaña de Trump para enfatizar su interés en liberar a Cuba del régimen castrista.
El Sur de la Florida es un punto clave para su triunfo en las elecciones presidenciales de noviembre y ahí radica la importancia de ganar la mayoría de los votos de la comunidad cubana y de los inmigrantes.
Cubanos por el Mundo
