El régimen cubano a través del Ministerio del Interior detectó una presunta “fábrica clandestina” de queso en la provincia de Artemisa, reseñaron los medios oficialistas.
La supuesta empresa ilegal de fabricación de este lácteo se ubica en el municipio Caimito, específicamente en la finca Santa Ana.
Según voceros de la dictadura, el queso que era elaborado en esa presunta “fábrica clandestina” en Artemisa era comercializado en La Habana a restaurantes que elaboran comida italiana.
“Eran trasladados en una auto propiedad de la esposa del dueño de la fábrica hacia el municipio Playa en la provincia de La Habana a tres restaurantes que elaboraban comida italiana. Este queso lo trasladaban tres veces a la semana a petición de los propietarios de estos lugares”.
Afirmó una funcionaria del Ministerio del Interior de Cuba.
Supuesto tráfico ilegal de leche en esta fábrica de queso en Artemisa
Asimismo, los representantes de la dictadura que procedieron a la inspección de este lugar informaron que, la fábrica de queso en Artemisa también incurrió en el presunto delito de tráfico ilegal de leche.
Según explicaron que, esta finca debe entregar alrededor de 150 litros de leche diarios al Estado, de los cuales solo estaba entregando 70.
“Quiere decir que hay 80 litros de leche diario que él está dejando de entregar diariamente al Estado”.
En ese sentido, la dictadura procedió a la ocupación de toda la maquinaria que poseía la fábrica de queso en Artemisa y al decomiso de al menos 316 litros de leche y 350 libras de quesos.
Los procedimientos de acoso y presión en contra del poco sector privado presente en Cuba siguen ganando fuerza y es que esta es una de las formas que ha encontrado el régimen castrista para justificar la falta de alimentos en la isla.
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Redacción Cubanos por el Mundo
