Los abusos de la policía castrista desde que se aprobó el Decreto 14 se han desatado de manera descarada, buscando atemorizar a la población, tanto que incluso cuando los cubanos que reciben multas advierten con denunciar en las redes sociales, los funcionarios responden: “Publícalo así es mejor para que se asuste la gente”.
Cada día el régimen le ofrece a la policía más herramientas para amedrentar a la ciudadanía con la imposición de sanciones injustificadas y con montos exageradamente elevados, bajo el pretexto de “propagación de epidemias”.
Este sábado en La Habana, un grupo de seis cubanos fue detenido “por estar sentado conectado en la wifi en el parque de 13 y 76 en Playa”, y algunos de ellos tenían bien puesto el nasobuco, tomando la distancia prudente, no estaban fumando, ni cometiendo ningún delito, solo estaban haciendo uso de la red de Internet.; según la denuncia del cubano identificado en las redes como Luis Luisovich Jañez.
“Llega de improviso el oficial con número de placa 23766 y me pide el carnet de identidad y me dice que vaya al camión de la policía, bajo el camión de la policía estaba el oficial con número 05868 con otros 6 “guarapitos”, conste que yo estaba tranquilo en el parque conectándome, le pregunto al oficial número 05868 y este me dice que son 2000 pesos de multa”,
escribió el usuario.
El irracional costo de la multa hizo que el cubano afectado se preguntara: “¿Quien gana 2.000 pesos en este país?”.
En este orden, el joven le hizo la misma pregunta al oficial castrista y le advirtió que “conocía a muchas personas y que esto iba a salir publicado como denuncia”. Para el funcionario esto solo fue una buena noticia porque de este modo, la gente sentiría más temor ante la presencia de un agente del castrismo: “Publícalo así es mejor para que se asuste la gente”, dijo el oficial.
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El denunciante dijo que obviamente los cubanos se tienen que asustar, pues el precio de la multa es tan alto, que ningún cubano, ni siquiera un policía castrista gana 2.000 pesos en Cuba, mucho menos durante los 6 meses de paralización de las actividades por la pandemia del COVID-19.
“A 6 meses del primer caso de Covid 19 detectado el 13 de marzo a un turista italiano en Trinidad, 6 meses sin trabajar, 6 meses donde la gran mayoría de los cubanos (que no dirigen este país ) han tenido que hacer de tripas corazón para mantenerse a flote. 6 meses sin entrada de salario para la mayoría de los ciudadanos de este país señores (…) Cómo alguien a estas alturas del campeonato se atreve a imponer semejante multa porque le sale de los berocos”,
cuestionó el joven.
La indignación del cubano también fue por la manera tan absurda en la que le impusieron la multa, pues alega no haber incumplido ninguna de las normas de prevención ante el COVID-19, sin embargo el funcionario del régimen actuó de manera arbitraria contra al grupo que solo buscaba conectarse a Internet.
Asimismo se preguntó: “¿Por qué un ciudadano tiene que ser víctima de semejante arbitrariedad? (…) ¿Por qué en este país el ciudadano es nada ante la maquinaria del Estado?”.
En el mismo orden, criticó el modelo socialista “que se supone que es del pueblo y para el pueblo”, sin embargo, le coloca multas a los cubanos por encima de sus sueldos y además, deben ser pagadas en un plazo de 10 días, o de lo contrario el monto se duplicará.
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Para el cubano que hizo la denuncia, es injusto que sea la población la señalada por la propagación del coronavirus, cuando fue la dictadura la que decidió cerrar las fronteras 17 días después de que se detectara el primer caso de COVID-19.
“Si el.gobierno cubano hubiera cerrado las fronteras a tiempo, ahora estaríamos a estas alturas trabajando muy seguramente. Ciertamente no es mía la responsabilidad de la propagación del COVID 19. 17 días tuvimos las redes sociales encendidas con los hashtag: #cierralasfronteras #quédateencasa”,
continuó.
Finalmente, dijo que no es la población quien tiene que pagar “los platos rotos” por la incapacidad del régimen para tomar medidas tempranas y contener la pandemia del coronavirus, mucho menos pagar un multa de 2.000, impuestas por la policía castrista, cuando tiene 6 meses sin trabajar por culpa de la COVID-19.
Redacción de Cubanos por el Mundo
