Este martes, el gobernador de La Habana Reinaldo García Zapata estuvo presente en el programa donde promueven su propaganda comunista Mesa Redonda, en el que reveló que, en la provincia capitalina podría suspenderse la medida de toque de queda en octubre.
En este sentido, García Zapata mencionó que, pese que que se tiene que seguir trabajando sobre las “indisciplinas sociales”, las órdenes de confinamiento obligatorio fueron anunciadas hasta el 30 de septiembre, por por lo que es necesario “aprovechar” epidemiológicamente el tiempo que queda para que se logre o establecido.
Refirió que en los últimos días se han hecho trabajos muy intensos en relación a los eventos de transmisión, por lo que han logrado cerrarse cuatro de los 15 que permanecían activos en el territorio. Pero también resaltó que se requiere ejercer algunas acciones de control para que antes de que inicie el décimo mes se puedan cerrar el resto de los eventos.
“La responsabilidad que asume el Consejo de Defensa está con la mirada puesta en el día 30 de septiembre, porque todas las medidas estaban establecidas hasta ese día”
dijo el funcionario quien aspira que el toque de queda pueda suspenderse para el 1 de octubre.
El gobernador castrista pidió la “máxima colaboración” tanto de los funcionario del régimen como de la población en general, para obtener buenos resultados en los próximos días, y que una vez que comience el venidero mes, solo quede evaluar lo que pueda suceder.
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Pese a que el régimen se ha encargado de colocar multas de manera desmedida a montos exagerados de 2000 y 3000 pesos, García Zapata hizo énfasis en el gasto que se ha tenido durante el brote de la pandemia, por lo que cree que es necesario levantar algunas medidas para que se permita producir y recuperar la inversión.
Desde la aparición del coronavirus en Cuba, La Habana ha sido la provincia donde mayor incidencia de casos ha habido. Para el momento en el que la dictadura declaró que tenían controlada la pandemia, la capital era la única que mantenía pacientes confirmados, pero después surgió el rebrote.
El repunte de los casos, obligó al establecimiento del toque de queda y otra serie de medidas en La Habana desde el 1 de septiembre, en un intento desesperado por contener la pandemia, dentro del Decreto 14/2020.
Redacción de Cubanos por el Mundo