Un cubano denunció a través de un post en Facebook, la negligencia médica que se cometió con su padre el pasado 5 de octubre en el Policlínico Mario Muñoz Monroe del municipio Abreu en la provincia de Cienfuegos.
“Lo que aquí hago público lo asumo responsablemente, no hubo valientes para mi padre”.
El señor Enehyver Quiñones Hernández, relató que su padre la tarde de ese lunes presentó un fuerte dolor en el pecho, fatiga y sudoración intensa, por lo cual fue llevado a ese centro hospitalario, donde es recibido por una doctora que estaba de guardia.
La doctora Aimet Sánchez Betancourt, lo recibe, ordena un electrocardiograma, toma la tensión arterial e informa a los familiares que todo “estaba bien”, según la mujer el señor presentaba una angina de pecho por lo que procedió a mandarle un método el cual solo le alivio el dolor solo por unos instantespo.
“Pasado unos minutos siente alivio y se va a casa, nadie le dice que debe esperar por determinado intervalo de tiempo”.
Quiñones Hernández, contó que mientras el señor estaba en su casa el dolor volvió pero esta vez mucho más intenso y con más fuerza , esparciéndose a los brazos, piernas y espalda.
“No transcurrió 20 minutos y aquel dolor volvió ahora con mas intensidad y fuerte presión, este se extendía a los brazos, piernas y espalda, pedía agua desesperadamente”.
Debido a esto, deciden trasladar al padre nuevamente al policlínico, donde otra vez lo recibe la misma doctora, quien le aplicó 2 tabletas de nitroglicerina sublingual y repite nuevamente el electrocardiograma.
Vuelven a decir “todo normal” en mientras cometían la negligencia
El hombre cubano, Quiñones Hernández, denunció que esta vez, le volvieron a indicar que todo estaba normal, pero proceden a canalizarle una vena, le ponen oxígeno y piden a Cienfuegos una ambulancia por código rojo.
Como es de costumbre para las emergencias en Cuba, las ambulancias son las últimas en llegar a los hospitales, y esta vez no fue la excepción.
El hombre explicó, que desde la una y media de la tarde llamaron a la ambulancia, mientras esta no llegaba su padre seguía retorciéndose del dolor “acostado y desesperado en aquel lugar”.
Según González, la doctora llamó nuevamente a la ambulancia pero esta nada que llegaba, haciendo de esas horas las mas largas y dolorosas para su familia y sobre todo para su padre, quien a espera de la ambulancia se moría del dolor en aquella camilla del policlínico.
“Mientras, sigue mi padre retorcido del dolor acostado y desesperado en aquel lugar, pasan las horas y no llegaba la ambulancia, la médico insiste al teléfono pero nada, no se vislumbra la ayuda tan esperada. Pasaron las horas mas largas y dolorosas para mi padre, sufrimiento indescriptible”.
El señor Enehyver Quiñones Hernández, indicó que su padre padeció todas esas horas de sufrimiento para después morir a las 4:26 de la tarde, y aun así la ambulancia nunca llegó.
“Fallece sin que llegará aquella ambulancia que era decisiva para salvar una vida, la vida de mi padre, solo 29 kilómetros separan Cienfuegos de Abreu”.
Indicó denunciando la negligencia médica.
El hombre, se pregunta indignado si no importó para aquella ambulancia y médicos la vida de su padre. “No había un valiente para mi padre”.
“Sería muy bueno si pagando la medicina obtuviera un buen servicio médico, calificado y comprometido con el juramento Hipócrates. Es triste escuchar a un profesional de la salud decir, esto te va a doler pero por eso no vas a morir”.
Tres horas y 20 minutos para atender un código rojo
Hernández, aseguró que la ambulancia llegó cuando su padre ya había fallecido y que estos tardaron aproximadamente unas tres horas y veinte minutos para acudir al llamado del policlínico.
Asimismo afirmó, que después se dirigió al centro hospitalario para buscar los electrocardiogramas que le fueron realizados a su papá y estos ya no estaban.
“Y ni pensar en recoger los electrocardiogramas realizados porque al pedirlos ya los habían desaparecidos”.
Aseguró el denunciante de esta nueva negligencia médica en Cuba.
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Redacción Cubanos por el Mundo
