Durante el recuento para las elecciones presidenciales de Estados Unidos, en el condado de Floyd de Georgia encontraron más de 2 mil 600 boletas electorales que no se contaron durante el proceso comicial.
El secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, culpó del problema a los funcionarios electorales del condado de Floyd que no pudieron cargar los votos de una tarjeta de memoria en una máquina de escaneo de boletas.
Hasta ahora otros condados no han encontrado boletas sin contar o las cifras de recuento coinciden estrechamente con sus números originales, dijo Raffensperger
A pesar de que el actual presidente estadounidense, Donald Trump, denuncia un fraude electoral, las papeletas contabilizadas probablemente harán poco para cerrar la brecha de 14.000 votos con Joe Biden.
Si el demócrata sale victorioso, habrá obtenido los 16 votos electorales del estado de Peach, volteando un campo de batalla sureño históricamente republicano.
Gabriel Sterling, de la oficina del Secretario de Estado, dijo a WSB-TV que las boletas recién descubiertas le darán a Trump 800 votos adicionales, lo que aún deja a Biden a la cabeza.
Debido a esto, en una conferencia de prensa el lunes por la noche, Sterling pidió la renuncia del director de elecciones del condado de Floyd.
“Dado que esto fue un error tan asombroso y tuvieron problemas en agosto, me gustaría que el director de elecciones en el condado de Floyd renunciara a su cargo”, dijo Sterling.
Denuncian coacción en recuento de votos en Georgia
El secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, dijo este lunes, 16 de noviembre, que el senador Lindsey Graham lo presionó para que encontrará una manera de descartar los votos legalmente emitidos en la cerrada elección estatal entre el presidente Donald Trump y Joe Biden.
Raffensperger relató que, presuntamente, habló con Graham, quien preside el Comité Judicial del Senado, el viernes y el senador de Carolina del Sur le preguntó si podía descartar todas las boletas enviadas por correo de los condados que tienen tasas más altas de firmas que no coinciden.
“Seguro que parecía que quería ir por ese camino”, dijo Raffensperger, expresando su incredulidad de que Graham quisiera que privara de sus derechos a grandes franjas de votantes de Georgia.
Por su parte, Graham negó las afirmaciones de Raffensperger diciendo: “Si se siente amenazado por esa conversación, tiene un problema”.
Graham explicó que no estaba cumpliendo con las órdenes del presidente Donald Trump cuando llamó al secretario de estado de Georgia para preguntarle sobre las leyes de firma del estado.
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Redacción de Cubanos por el Mundo.