El diario La Nación de Costa Rica, le respondió de forma dura y contundente al embajador de Cuba en el país caribeño, Jorge Rodríguez, con un artículo de opinión titulado “Miente el embajador de Cuba” luego de que este tildara de “mentiras” la información que el rotativo reseñó sobre el Movimiento San Isidro y la represión que desató el castrismo en su contra.
Rodríguez, hizo pública una queja llamada “La Nación miente” afirmando que en la publicación se dicen “36 mentiras” sobre el Movimiento San Isidro, sus integrantes y el régimen cubano. “En su escrito, intitulado La Nación miente, el embajador cubano responde el Editorial ‘Protestas y represión en Cuba’ publicado en la edición de este domingo 20 de diciembre, y sostiene que la veracidad de sus afirmaciones puede ser comprobada en internet y en las publicaciones en redes sociales de las personas mencionadas”, detalla Prensa Latina.
Y en efecto, siguiendo la recomendación de la agencia castrista, es muy fácil comprobar a través de Internet y en redes sociales que La Nación no miente y quien se encarga de mentir de forma descarada, pero acostumbrada, es el régimen cubano, su prensa panfletera y ahora, el embajador de Cuba en Costa Rica. Lo más reciente que se puede comprobar en Internet es la agresión que sufrió el periodista Carlos Manuel Álvarez, quien fue secuestrado y golpeado por esbirros castristas sin razón alguna.
Conociendo la realidad de Cuba y el comportamiento habitual de los funcionarios castristas, el diario La Nación, luego de publicar la “respuesta” del funcionario en su plana, en un clarísimo gesto de libertad de prensa que ya quisiera La Habana ejercitar algún día, de primera mano le indicó a Jorge Rodríguez que ellos no eran el Granma, que trabaja de forma servil y complaciente a los intereses comunistas, y que nadie podía venir a darles órdenes, tal como hace el castrismo, a través del Departamento encargado de la “orientación ideológica (robo ilusionaria)” con sus periodistas.
“La Nación no es Granma, periódico oficial de la dictadura cubana. No mentimos, como lo hace Granma de forma cotidiana, ni puede el embajador decirnos sobre qué informar, como lo hacen las autoridades cubanas con su prensa sumisa. El Gobierno de Costa Rica no nos gira instrucciones, menos las vamos a aceptar de un diplomático extranjero”.
Detalla que ni su redacción ni la prensa independiente internacional miente sobre lo que ocurre en Cuba, ya que las denuncias sobre la represión y violaciones de derechos humanos son más que evidentes.
“No vale la pena extenderse sobre el texto del embajador. Basta una muestra para aquilatar sus afirmaciones: “Denis Solís no es rapero, ni artista según ha dicho la misma Agencia Cubana de Rap que agrupa a los intérpretes de ese género musical”. La Agencia Cubana de Rap, subordinada al Instituto Cubano de la Música, dependiente del Ministerio de Cultura del régimen, decide quién es artista de ese género y punto. ¿Podría haber mejor prueba del minucioso control del régimen cubano sobre todo tipo de expresión que la existencia misma de una agencia del rap? Sería cómico si no fuera tan trágico”.
Por último reta al embajador de Cuba en Costa Rica a publicar dicha respuesta en la prensa cubana para que los cubanos sepan lo que ocurre más allá de sus frontera, pero sabe que no será así, pues solo autorizan las publicaciones que consideran convenientes.
“Si el embajador estimara conveniente publicar esta nota de redacción en la prensa cubana para poner a sus conciudadanos al tanto de lo que se dice en el extranjero, desde ahora autorizamos la reproducción”.
Redacción Cubanos por el Mundo