El régimen castrista sigue tratando al pueblo cubano como ciudadanos de quinta, que no merecen comer más que clarias, mientras está exportando langostas a Canadá.
A través de la red social Facebook, un cubano identificado como Jorge Luis Torres Morejón denunció que, una empresa del castrismo lleva el crustáceo hasta el país del primer mundo, para que sena los ciudadanos de esa nación quienes puedan disfrutarlos.
El antillano apeló a la ironía al decir que, se trata de “un verdadero gesto de solidaridad, exportar nuestros recursos para que los pobres del Primer Mundo (Canadá) puedan disfrutar de ellos…Nosotros nos conformamos con arroz y croqueticas”.
La exportación de langostas a Canadá ocurre en medio de una crítica y cada vez más profunda crisis de desabastecimiento y escasez de alimentos en la isla, donde los cubanos (en el mejor de los casos) únicamente tienen acceso a clarias o alevines.
El crustáceo está siendo llevado hasta la nación norteamericana por la Empresa Comercial Caribex, fundada tras la llegada de Fidel Castro al poder, la cual es la única en Cuba que se encarga de exportar los productos pesqueros hacia los grandes mercados internacionales con el sello “Caribbean Queen”.
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En los primeros meses del 2020, la televisión cubana anunció el sobre cumplimiento de la captura de langostas, sin embargo, el los cubanos no las han visto ni siquiera y en caso de que la vieran sería en el mercado negro y no tendrían acceso a la misma, debido a la pobreza en la que están sumergidos.
A través del aparato de propaganda de la dictadura, dijo que en 2019 que Caribex exportó un ocho mil 96 toneladas de langostas a países en Asia, Europa y el Caribe, valoradas en 82 millones 351 mil pesos convertibles.
En ese momento, el popular presentador cubano Alexander Otaola, preguntó: ¿desde cuándo el pueblo cubano no comía langosta?, ya que el régimen cubano no la vendía libremente a través de la libreta.
“Nunca verdad, yo viví 24 años en Cuba y nunca vi que me autorizaran a comer langosta, la langosta que comí, la comí porque las compraba en el mercado negro”,
dijo el influencer en su programa Hola! Ota-Ola.
Cabe destacar que, el mismo régimen reconoce que hay una línea de producción nacional y otra para exportación, es decir, que las empresas pesqueras se encargan de procesar las clarias y los alevines para el pueblo cubano, mientras que las langostas con únicamente para el consumo de personas en el exterior y llevadas hasta los hoteles cinco estrellas administrados por el régimen, sin contar la parte de consumo único para la cúpula castrista.
Redacción de Cubanos por el Mundo
