Como si no fuese suficiente el amplio historial complaciente del “sindicato” existente en Cuba, organizado en la “Central de Trabajadores de Cuba (CTC), el reordenamiento monetario vuelve a exponerlos una vez más, cuando ahora piden que los involucrados sirvan de “factor de prevención, análisis e información”, en medio de las inconformidades generadas en los distintos grupos con las nuevas medidas adoptadas.
En palabras del secretario general de CTC, Ulises Guilarte de Nacimiento – y admitiendo la carente credibilidad del sindicato – debe rediseñarse la forma en la que actualmente se desenvuelve la organización, dando como orden que solo podrán comunicarse con la “administración”, estando en pleno conocimiento de sus “misiones”, augurando que continúen cada vez más silentes en medio de las molestias generadas en la adopción de las nuevas medidas del reordenamiento.
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La petición de Guilarte de Nacimiento para quienes conforman su agrupación, es usual: bajar las órdenes del patrono régimen cubano para su obediencia total por parte de los trabajadores, sin hacer las veces de interlocutor de necesidades y aspiraciones del sector obrero. Inevitablemente, el régimen cubano busca a toda costa congraciarse con los sectores sociales (controlados por subgrupos del PCC), en medio de un polémico reordenamiento económico, que busca recuperar las finanzas de la cúpula.
El “redescubrimiento” de la necesidad de suspender subsidios malsanos, así como la desesperada búsqueda de divisas, ha traído consigo grandes cuestionamientos, que se verán de manifiesto en la cotidianidad de los grupos trabajadores, a pesar de la presión.
Trabajadores cubanos en defensa de sus conquistas
Los afiliados a los diferentes sindicatos acumularon en el 2020 más de 38 millones 500 mil para Mi aporte a la Patria,
Carmen Rosa López Rodríguez, segunda secretaria de la CTC la Central de Trabajadores de Cuba. #SomosCuba pic.twitter.com/WkxxYpglv2— Orestes EugellésMena (@oemena) January 4, 2021
La situación de la COVID-19 no quedó por fuera de la mención que hiciera Osmar Ramírez, el Secretario general de la CTC en Matanzas. Sugirió que debía evitarse la proliferación del virus en centros laborales, con mención especial en aquellos de altas concentraciones, como ya ha ocurrido en el pasado. La existencia de focos de contagio en centros laborales estatales, convertidos posteriormente en brotes, ha tenido amplia cobertura durante los últimos meses, aún a pesar del hermetismo del régimen cubano, incluyendo hospitales públicos.
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Redacción Cubanos por el Mundo