Sin referir cuáles son las “reacciones adversas leves”, la prensa oficialista cubana anunció el cierre del ciclo corto de ensayos de la vacuna cubana vía nasal, nombrada Mambisa, así como la aplicada vía intramuscular, de nombre Abdala.
Según anuncia Prensa Latina, las investigaciones iniciadas el pasado 7 de diciembre, en el Hospital Carlos J. Finlay de La Habana, involucraron a un grupo de 88 personas, desplegadas en cuatro grupos de análisis para el estudio de la vacuna en ambas formas de suministro. Ambas vacunas están siendo desarrolladas por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología. De momento, solo Mambisa está previsto que se suministre vía nasal.
Explica el reporte que quienes formaron parte de los grupos de investigación fueron sometidos a una primera dosis de la vacuna vía intramuscular, y posteriormente dos por vía intranasal; otro grupo en cambio recibió tres dosis de la última modalidad. Aseguran que en el tiempo de estudio posterior, se confirmó la “seguridad del fármaco al solo existir reacciones adversas leves”. No obstante, no se detalla cuáles serían estos posibles efectos secundarios de la vacuna cubana.
Sin embargo, aún corresponde realizar evaluaciones, en lo que denominan será el tiempo largo del estudio. La segunda vacuna por su parte que también dio clausura al ciclo corto de evaluación, desarrollándose en Santiago de Cuba, está trabajando con un grupo de poco más de 100 voluntarios, bajo supervisión. Según agrega la prensa oficialista, en el caso de Soberana 01 y 02, también continúan en fase de desarrollo, completando así las cuatro propuestas del régimen cubano en medio de la COVID-19.
Hasta diciembre de 2020 la Organización Mundial de la Salud había autorizado ante la emergencia del coronavirus la aplicación de la vacuna de Pfizer/BioNTech. Otras vacunas por su parte, han sido autorizadas en determinados países.
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Redacción Cubanos por el Mundo