Este jueves la Policía Nacional en Madrid identificó a los dos hombres que faltaban entre los cuatro fallecidos en la explosión ocurrida el pasado miércoles en el centro de la ciudad.
Uno de los ciudadanos que falleció en la explosión es Javier Gandía, un albañil de 45 años y vecino de La Puebla de Almoradiel, un pueblo de 5 mil 500 habitantes al sureste de Toledo y a unos 130 kilómetros de Madrid.
El alcalde de La Puebla de Almoradiel, Alberto Tostado, explicó al diario elmundo.es que Javier tenía una familia con dos hijos y estaba al frente de su pequeña empresa de construcción que le generaba empleo mayormente en Madrid hasta donde se trasladaba todos los días.
“Estaba en una obra aledaña y le pilló cuando pasaba por la calle. Iba a la furgoneta a algo. Es increíble la mala suerte que ha tenido”, expresó el alcalde.
Javier Gandía, era muy conocido en La Puebla de Almoradiel y colaboraba con la asociación de fútbol infantil de la localidad, donde participa su hijo.
El otro identificado es Stefko Ivanov, un ciudadano búlgaro vecino del barrio de Antón Martín que justamente el día de hoy hubiese cumplido 47 años de edad.
Rangel, un amigo del segundo identificado como fallecido, Stefko Ivanov, contó que al no conseguirlo llamó a la policía.
“He llamado a la Policía porque no lo localizamos y me ha confirmado que es él”, dijo Rangel.
Rangel comentó que el ciudadano búlgaro llevaba unos 15 años residiendo en España y que no tiene familia en el país.
“Ha trabajado como obrero de la construcción, pero unos días tenía obras y otros no y ahora llevaba tiempo sin trabajar”, dijo.
“Iba a un comedor de la iglesia en la zona. Yo creo que le debió de coger cuando pasaba por allí”, añade Rangel.
Estos dos hombres perdieron la vida mientras caminaban por la calle y fueron aplastados por los escombros y cascotes que desató la explosión.
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En la explosión en el centro de Madrid, también fallecieron David Santos, de 35 años, que era un seguidor de la iglesia católica que había acudido a la parroquia para intentar arreglar la caldera.
El otro ciudadano que perdió la vida fue Rubén Pérez, uno de los sacerdotes de la iglesia, de 36 años, quien en primera instancia resultó herido, pero no pudo recuperarse de las lesiones y murió la madrugada del jueves en el Hospital de La Paz.
Actualmente solo permanece ingresado un herido según el último balance de los hospitales del Servicio Madrileño de Salud de la Comunidad de esa ciudad.
Se trata de un señor de 53 años que está en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid con traumatismo craneoencefálico leve y fracturas costales y que podría recibir el alta medica este jueves.
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Redacción Cubanos por el Mundo
