En un país como Cuba, donde las oportunidades de superación y trabajo son limitadas a menos que le vendas tu alma a la ‘revolución’, los jóvenes, que no tienen los recursos o el apoyo para abandonar la isla cárcel y rehacer su vida en otra nación, deben recurrir a una práctica ancestral que les permita sobrevivir, la prostitución.
Si bien el tema de la prostitución en jóvenes ya se ha tocado con anterioridad en Cuba, resulta alarmante como cada vez son más las personas que deciden vender su cuerpo al no contar con un trabajo digno, que les garantice una vida adecuada, algo que contrasta totalmente con el discurso comunista.
El portal CubaNet, entrevistó a un joven al que identificó como Alex, quien afirma que se vio obligado a prostituirse porque en Cuba “se pasa mucho trabajo” y los salarios ofrecidos por las empresas estatales no van acorde con la realidad económica de la nación.
“Se pasa mucho trabajo en este país para comprar cualquier cosa. Por eso decidí prostituirme”, afirma Alex. “Tenía que prostituirme porque un salario no me alcanza para vivir un mes completo”.
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Los clientes de este joven cubano son, en su mayoría, extranjeros que buscan “sexo barato” en la isla cárcel. A menudo los “pescaba” en el malecón habanero. “Yo los buscaba o ellos a mi, todo depende”. Los encuentros sexuales se llevan a cabo en hostales cercanos para garantizar la intimidad.
Tarea Ordenamiento aumenta tarifas de la prostitución en Cuba
La llamada “Tarea Ordenamiento” no solo aumentó los precios de los productos y alimentos en Cuba, sino también el costo por tener sexo con uno de estos jóvenes. “Las tarifas aumentarían porque todo esto se está poniendo peor”, afirmó Alex.
“Esto está más malo. Hay que subir las tarifas porque todo ha subido, eso debe de subir”. Al ser preguntado de cuánto sería el aumento, el joven informó que por un “servicio” se llegaría a cobrar dos mil 500 pesos cubanos. Aunque reconoce que con eso “no alcanza para nada”.
Redacción Cubanos por el Mundo
