No hay esperanza alguna de que la situación con el pan en La Habana se solvente a corto o mediano plazo. Eso puede deducirse de una nueva jornada de fiscalización que confirma el cierre de al menos 64 puntos de venta de alimentos, 53 de ese grupo por carente producción y la diferencia debido a la suspensión de licencias de cuentapropistas o modificación en cargos administrativos.
Según reporta la prensa oficial, desde la Empresa Provincial de Industria Alimentaria aseguran haber incrementado las fiscalizaciones para dar con alteraciones de precios en la producción y distribución de pan en La Habana, siendo el resultado la toma de al menos 118 sanciones contra los implicados.
En las medidas, aseguran haber considerado inclusive – sin que se precise sobre cuántos o qué cargos – la decisión de despedir a implicados. En su mayoría, se habla de responsables administrativos, 26 para ser más exactos, vinculados en irregularidades, así como 31 maestros panaderos, 10 jefes de turno, 16 operarios, 20 horneros, además de contadores y algunos independientes.
Inclusive, la Agencia Cubana de Noticias asegura que quien estaba a cargo de la Unidad Básica de Industria Alimentaria en el municipio Playa de La Habana, salió por la puerta de atrás, debido a las persistentes denuncias y la confirmación de las irregularidades en torno a la producción de pan en esa localidad.
Falta de pan en La Habana: contando con provincias cercanas
El cierre de puntos de venta abre una duda razonable: ¿significará entonces menos pan del que ya faltaba en la capital? Según detalla ACN, las provincias próximas de la capital están al día con la producción de días venideros, con disponibilidad de otros productos, haciendo referencia a aquellos que pertenecen a la canasta familiar del mes de febrero.
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Durante el mes de enero se han incrementado las denuncias relacionadas a la venta de pan en La Habana, que se han visto expuestas en las interminables colas de compradores, así como la falta del producto o el bajo peso que presentan una vez que logran hacerse con él. Sin embargo, y a pesar de la subida considerable que subió su precio con el “ordenamiento”, también han trascendido denuncias de violaciones de precios, además de la demora para que lleguen a los puntos de distribución dispuestos.
Pero las problemáticas del pan en La Habana no son para nada recientes. La mala calidad del producto así como su falta han sido reiteradamente denunciadas por los cubanos. Inclusive, en prensa oficial se ha admitido su falla, que va desde la producción hasta la distribución. Mientras que el pan en Cuba es cada vez más bajo de peso, la el malestar de la población se infla sin levadura alguna.
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Redacción Cubanos por el Mundo
