La administración de Joe Biden está revisando la inclusión de Cuba en la lista negra de Estados Unidos de patrocinantes del terrorismo, según indicó durante una entrevista el Secretario de Estado, Antony J. Blinken con Andrea Mitchell de MSNBC.
Interrogado sobre si revocará la designación de terror en Cuba, Blinken aseguró que la administración saliente – la de Donald Trump – había tomado decisiones, incluida la designación como país promotor del terrorismo, así como otras medidas adoptadas durante el periodo de gobierno, que están siendo evaluadas.
Como es de esperarse, la prensa oficialista ya reportó sobre estas “evaluaciones” de la administración Biden, luego de haber calificado de “oportunismo político” la decisión de Trump de incorporarlos en la lista.
Sin embargo, esta decisión no sería tan sencilla ni dependería de solo una firma. De acuerdo a un reporte de The New York Times, tendría que el Departamento de Estado realizar todo un proceso de revisión que pudiese tomar varios meses.
El presidente Donald Trump, hasta el último día en la Casa Blanca mantuvo su posición en torno a Cuba. Inclusive, el pasado 11 de enero, a pocos días de abandonar la Oficina Oval, se conoció la decisión de incluir a Cuba en este listado y fue el secretario de Estado entonces, Mike Pompeo, quien hizo el anuncio.
“Con esta medida de nuevo responsabilizamos al gobierno de Cuba y mandamos un claro mensaje: el régimen castrista debe acabar con su apoyo al terrorismo internacional y con la subversión de la justicia estadounidense”, se lee en el comunicado fijado por el exfuncionario de la administración Trump.
En el año 2015, en medio de las gestiones del deshielo, el expresidente Barack Obama decidió retirar a Cuba de esa lista, como parte del restablecimiento de las relaciones diplomáticas en la que se encontraba desde 1982 por decisión del presidente Reagan, acusando al régimen de Fidel Castro de respaldar a movimientos de izquierda en América Latina. Sin embargo, la administración Trump no vio con beneplácito la cercanía entre Cuba y Estados Unidos, en vista de las reiteradas violaciones de derechos humanos que continúan registrándose en la isla, además de sus tentáculos sobre el régimen de Nicolás Maduro y la dinámica venezolana.
Pero el retorno de Cuba en la lista negra de patrocinantes del terrorismo, también tiene su lugar gracias al “respaldo” que desde el régimen cubano han sostenido tanto al Ejército de Liberación Nacional (ELN) y a disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Por décadas “el gobierno cubano ha alimentado, alojado y brindado atención médica a asesinos, fabricantes de bombas y secuestradores, mientras que muchos cubanos pasan hambre, se quedan sin hogar y no tienen medicamentos básicos”, se leía en el comunicado de Pompeo.
Redacción Cubanos por el Mundo
