Ricardo Camejo Fernández, residente de Holguín, es un trabajador que ha perdido su empleo incluso teniendo el fallo del Tribunal Supremo a su favor.
Ricardo Camejo trabajaba como especialista en Asistencia Técnica en la Sucursal Moa de la empresa mixta Unevol S.A., que brinda servicios de posventa a los equipos de transportación minera en las plantas de níquel.
En el mes de noviembre de 2019 lo separaron de su puesto por dos días de ausencia que no era injustificada, pues el trabajador explicó a Juventud Rebelde, que su jefe inmediato lo había autorizado.
Ricardo Camejo contó que en sus vacaciones, viajó a Haití, donde por asuntos internos del país se suspendieron temporalmente todos los vuelos. Esta situación no le permitió retornar a Cuba y reincorporarse a su trabajo, solo por un margen de dos días.
El hombre relató que desde Haití se comunicó con su jefe inmediato, quien le aprobó la extensión de sus vacaciones. Posteriormente cuando regresó a su lugar de trabajo, el jefe de la Sucursal no lo aceptaba y le aplicaron la separación definitiva.
Ricardo fue a la Dirección de Trabajo Municipal y asignaron el OJLB de la empresa Moa Nickel S.A, el que falló a favor de su reclamo en la vista.
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En la empresa le notificaron al trabajador, que el fallo a su favor debía ser presentado a la empleadora Tecnosime, la encargada de suministrar fuerza de trabajo a Unevol S.A.
Sin embargo todo éste proceso no le generó ningún beneficio al trabajador, puesto que hasta 14 meses después, en la empresa no le dan respuestas y permanece desempleado, por una causa en la que legalmente tiene razón.
En este sentido el afectado exige al régimen que se hagan cumplir las leyes con respecto a su caso, así como con el resto de trabajadores que viven su misma situación y que no cuentan con ningún organismo que los defienda.
“Desde que comenzó el proceso hasta ahora, han pasado 14 largos y complejos meses de confinamiento por la COVID-19, meses en que mi familia se ha visto afectada económicamente por dos días de ausencia “injustificada”, cuando mi jefe inmediato había autorizado. Pido que se haga cumplir la ley”, concluye el trabajador.
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Redacción Cubanos por el Mundo
