El tribunal municipal de Arroyo Naranjo cerró sus puertas, luego de ser detectado un brote de covid-19 en sus instalaciones.
La información fue suministrada por una empleada del tribunal, quien especificó que la primera en dar positivo a la enfermedad fue una trabajadora del lugar.
“Inmediatamente suspendimos todos los trabajos, procedimos a fumigar y desinfectar y se les realizó el PCR a todos los trabajadores del tribunal, como está establecido. Ahora estamos a la espera de los resultados de las pruebas”, aseguró la fuente a Diario de Cuba.
En este sentido suspendieron todos los procesos judiciales hasta nuevo aviso.
Por su parte, otro trabajador del tribunal, explicó que tienen planificado que los empleados se vayan incorporando a sus labores, a medida que van recibiendo los resultados de las pruebas PCR y estos salgan negativo.
Esperan poder regresar a la normalidad poco a poco a partir de la próxima semana, pero con lo tardío que es el proceso de los exámenes PCR que realiza el sistema de salud castrista y la tardanza en entregar los resultados, tal vez pase más tiempo.
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El trabajador del tribunal manifestó que desconocen la causa de infección y que entre ellos respetan las medidas de bioseguridad establecidas.
“Incluso tenemos una pistola para tomar la temperatura y ningún trabajador puede venir a trabajar con síntoma alguno”, explicó.
El trabajador manifestó su descontento con que el tribunal continuara sus labores normales pese a la pandemia y la situación epidemiológica complicada que atraviesa La Habana.
Consideró que es una irresponsabilidad del régimen mantenerlos exponiéndose al público, lo que representa un gran riesgo para la salud de los que ahí laboran.
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Redacción Cubanos por el Mundo
