La (in) Justicia cubana queda de nuevo en evidencia. Mientras el régimen le miente al mundo afirmando que en Cuba se respeta la liberta de expresión y los derechos humanos, el cubano Yoennis Domínguez de la Rosa es condenado a cinco años de prisión solo por haber difundido en redes sociales el video de la protesta que se llevó a cabo en febrero 2020 en Santiago de Cuba por la violación de una niña de ocho años.
Según informa Radio y Televisión Martí, la sentencia le fue entregada al cubano el pasado miércoles. “Cinco años de trabajo correccional con internamiento”, explica el cubano. “cinco años por atentado y dos años por desorden público; sanción conjunta, cinco años” detalla, alegando que de ninguno de los dos cargos es culpable, ya que lo único que hizo fue revelarle al mundo lo que se vive en la isla cárcel.
Recordemos que la protesta fue de ciudadanos contra los funcionarios castristas, quienes protegieron al violador. Luego de los enfrentamientos, la dictadura desplegó a sus funcionarios para darle cacería a los que estuvieron involucrados en el incidente.
En el caso del joven cubano, fue llevado a prisión donde estuvo cinco meses y 20 días, saliendo bajo fianza apenas el pasado agosto. Según Domínguez de la Rosa, la petición fiscal “estaba llena de agravantes”, entre ellos, el de haber cumplido ocho meses de privación de libertad en 2014, cosa que, explica, nunca ocurrió.
Fue llevado a juicio de manera repentina el pasado noviembre de 2020, donde no se presentaron pruebas en su contra, pero eso poco le importó a la (in) Justicia cubana.
“No hay una prueba que puedan mostrar, porque, en 93 videos que subieron, no aparezco ni en un video ni en una foto. Entonces, el perito de audio, el que podía hacerme el reconocimiento de voz, declaró en el juicio que él no puede asegurar, ni confirmar, que yo soy el que estoy gritando”, explicó el acusado.
La única evidencia que tiene la policía en su contra es un video que se encontró en el celular. “El fiscal se refirió a mí como que yo era el joven que había publicado un video en mis redes sociales, el cual avergonzó al país”.
El cubano inició la apelación del caso ya que de no hacerlo, deberá ingresar a prisión el 25 de marzo por un crimen que no cometió.
Redacción Cubanos por el Mundo
