Pese al fuerte desabastecimiento de alimentos y productos que experimenta Cuba actualmente, el régimen decidió rechazar las mil 300 coles que el campesino cubano Héctor González, miembro de la cooperativa Pedro y Bienvenido, del municipio Minas de Matahambre, en Pinar del Río, había recogido a petición de Acopio.
¿Cuál fue la razón de este rechazo? Según se informa en redes sociales, Acopio dijo que no aceptaba el producto porque ya se había “cumplido el plan mensual”.
Pero el panorama en los agromercados del país es totalmente diferente. Mientras Acopio rechaza las mil 300 coles de este campesino cubano, el desabastecimiento se siente en los agromercados, por lo que no existe justificación en base al cumplimiento de un plan para haber rechazado la carga.
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Cabe resaltar que al no aceptar el cargamento, Acopio tampoco le pagó el trabajo que le tomó a este campesino cubano cosechar el producto. El hombre, ni siquiera pudo venderlo por su cuenta, pues las estrictas leyes del gobierno se lo prohiben.
“La respuesta que le dieron fue que no había fuerza de trabajo y que ya la empresa había cumplido su plan. Ahora yo digo: cómo se va a estar pensando en cumplir un plan teniendo la provincia una situación tan desfavorable con la COVID-19. Señores, hay que pensar como país. Ese producto pudo haber sido utilizado para la alimentación de los enfermos y personas ingresadas en los centros de aislamiento”, escribió.
Esto es una muestra de las deficiencias que tiene la dictadura para impulsar la producción nacional y así acabar con el desabastecimiento. Este es el bloque interno, que artistas defensores del régimen como Israel Rojas alegan que no existe.
No es la primera vez que Acopio lo hace
En los comentarios de la publicación, otros campesinos cubanos afirman que no es “la primera vez” que algo así ocurre en el país.
“Eso no es nuevo, ha sucedido con otros cultivos como plátano, tomate que se han podrido en el campo en espera de acopio, organismo que debería de desaparecer. Muy triste la situación del cubano y no se ve luz al final del túnel, cada día peor”, dice Jesús Valdés.
Otro campesino dijo haber perdido por similares causas 10 quintales de frijoles.
En los comentarios dejados debajo del post, todos en general expresan que por razones como estas es que los campesinos cubanos no quieren trabajar o producir, ya que su trabajo no se ve reflejado en beneficios ni para ellos ni para el pueblo.
El pasado año un campesino denunció que Acopio no quiso recibirle un cargamento de piña y esta se echó a perder también en el suelo.
Su post fue viral en las redes sociales y demuestra que el engendro de Acopio, un mecanismo creado por el Castrismo hace ya varios años en aras de una pretendida “distribución de alimentos”, simplemente no funciona.
Redacción Cubanos por el Mundo
