Familiares y amigos del cubano Esneiquel Galdo Arechea, quien falleció el pasado 2 abril al intentar atravesar el Río Bravo, frontera natural que divide a Estados Unidos con México, informaron que para repatriar su cadáver a Cuba están cobrando la suma de 15 mil dólares, monto que no tienen en este momento.
Los amigos informaron además que el actual panorama provocado por el coronavirus, hace más difícil y “engorrosa” la repatriación del cubano que falleció en el Río Bravo, detalla Telemundo 51. Durante una entrevista con la cadena hispana, denunciaron además que el régimen de Cuba se niega a recibir cadáveres de cubanos fallecidos en el extranjero por la COVID-19.
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Detallaron que tuvieron que mover “todos los medios” para localizar el cuerpo e iniciar el proceso de repatriación, sin embargo existen varias trabas, la primera de ellas en la burocracia comunista y la segunda el alto costo del proceso.
El proceso de repatriación se encareció debido a la COVID-19, informan los familiares, pero lo más difícil de hacer es que Cuba acepte el cadáver.
Galdo Arechea tuvo que atravesar todo Brasil, para luego pasar por Centroamérica para finalmente llegar a la frontera con Estados Unidos. Una vez allí, se dio cuenta que iniciar el proceso de asilo político no eran tan fácil como pensaba, por lo que decidió arriesgarse en el Río Bravo, travesía que acabó con su vida.
“Voy a esperar dos o tres días del lado acá, estoy en Acuña, para brincar porque el río está un poco crecido”, fueron las últimas palabras del cubano para sus familiares.
Damaris Marín, una vecina del fallecido, informó que la Guardia Fronteriza llevó el cuerpo el día tres que lo encontraron al lado del río. Por otro lado Mairelis Zequera, una amiga del migrante cubano fallecido, asegura que para ella, Galdo Arechea fue ahogado porque no se explica como no pudo atravesar cuando los demás que lo acompañaban si lo lograron.
El cuerpo del cubano fue encontrado en una morgue en Texas con el pasaporte entre sus pertenencias. La mencionada morgue solo retendrá el cuerpo unos 60 días. “La madre está desesperada y la niña quería verlo en una videollamada”, dijo Zequera.
“Dicen que Cuba no está recibiendo cadáveres allá. La única funeraria que nos dijo que si, que lo lleva hasta La Habana, cobra 15 mil dólares”, dijo una amiga del cubano fallecido.
Redacción Cubanos por el Mundo