Los representantes de la dictadura son capaces de sancionar a los cubanos por supuestos fraudes eléctricos, al mismo tiempo que la prensa castrista critica a quienes por necesidad, intentan disminuir el valor de la factura de la electricidad porque el salario no les alcanza para pagarla.
El régimen se ha encargado de castigar a los cubanos que se ven obligados a trastocar el contador de la electricidad de sus viviendas, como una manera de tratar de disminuir el monto de la electricidad, ya que durante meses han exigido al comunismo la disminución de la tarifa ante el aumento elevado que sufrió después de la radical medida de la dictadura del (des) ordenamiento monetario.
Los medios castristas critican la situación, pero ninguno habla del miserable sueldo mínimo que cobran los cubanos, que no les alcanza para pagar los servicios y alimentarse al mismo tiempo, ni nadie reconoce la realidad y es que el monto de las facturas de la luz, son cantidades que a nadie les alcanza pagar en la isla.
La solución del comunismo ante la situación, es multar a quienes caigan en estas acciones que califican como “corrupción”, pero el régimen no tiene cara para pronunciar esa palabra, mientras que los corruptos y estafadores en la isla son ellos.
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Los directivos de la Unión Eléctrica reconocen que los casos que ellos llaman “fraudes eléctricos”, están relacionados con los mismos trabajadores de la empresa eléctrica, quienes podrían ser los que permiten que esas situaciones sucedan a cambio de beneficios personales.
Es importante destacar que durante el año 2021, hasta finales del mes de febrero se habían impuesto 1 mil 467 multas y en el año 2020 fueron más de 13 mil multas que la dictadura impuso por “fraudes eléctricos”.
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Redacción Cubanos por el Mundo