Mientras el régimen castrista construye hoteles e infraestructuras innecesarias como la bandera gigante frente a la Embajada de Estados Unidos en La Habana, la vida de muchos cubanos corre peligro por viviendas en deterioro que están a punto de derrumbarse, como la del joven cubano Leandro Castillo y su mamá.
El antillano, quien reside en Centro Habana, hizo la denuncia en el programa Hola! Ota-Ola en donde detalló que, la dictadura cubana no ha respondido a las solicitudes que ha realizado para que reparen su vivienda.
El joven cubano precisó que, actualmente su casa está inhabitable después de que, el pasado 30 de mayo de 2020 un pedazo del techo de la infraestructura se derrumbó y hasta el momento ni el organismo de vivienda del régimen ni las autoridades locales han hecho algo para ayudarlo a él y a su mamá, una mujer de 49 años hipertensa, para que puedan hacer las reparaciones correspondientes.
“Yo me siento impotente al ver que no puedo hacer nada porque los materiales de construcción acá están extremadamente caros, y como usted comprenderá no tengo esa cantidad de dinero para reconstruir mi techo”.
Le dijo el joven, de 24 años al presentador cubano Alex Otaola.
En ese sentido, indicó que, la parte afectada está en la parte de arriba de la vivienda en donde está un cuarto y un baño, por lo que cada vez que ellos necesitan bañarse o hacer sus necesidades corren el riesgo de que el techo pueda terminar de caerse y generar una tragedia.
El cubano apuntó que, acudió al “gobierno de Centro de Habana” para solicitar ayuda y después de esperar seis horas para que lo atendieran, la secretaria les dijo que “esa solución la tenía el intendente”, quien responde al nombre de Rodolfo. “El intendente, en el primer encuentro, casi que lo cogimos fuera del gobierno y en ese momento nos dijo que no nos podía atender porque tenía una reunión”, indicó.
Asimismo, el joven cubano aseguró que, él y su mamá estuvieron insistiendo por alrededor de dos meses para verse con el intendente, pero éste se escondía, y posteriormente enviaron cartas a otros organismos sin obtener una respuesta concreta.
“Se sigue cayendo un pedazo del techo todos los días y yo tengo miedo de que nos suceda algo a mi o a mi madre”.
Agregó.
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El joven cubano sobre el alto costo de los materiales de construcción en Cuba
De igual manera, el joven cubano, quien es cocinero, reiteró que ante el alto costo de los materiales de construcción en la isla se hace imposible poder reparar su vivienda, ya que su salario apenas le alcanza para costear sus necesidades básicas.
“Un saco de cemento me sale en 1500 pesos, una tira de cabilla me sale en 900-1000 pesos (…) No llego a ese dinero”.
Indicó.
La situación de este joven cubano se repite a lo largo y ancho de la isla comunista, en donde las infraestructuras que tienen más de 100 años de construidas están sumamente deterioradas y la dictadura castrista no se preocupa en arreglarlas, pero si saca recursos para construir hoteles y mejorar los edificios estatales demostrando la indolencia ante el pueblo cubano.
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Redacción Cubanos por el Mundo